La semana pasada en este mismo medio se publicó un artículo demandando un tercer centro de salud para Tudela y acusando a la Consejería de Salud de tener una visión cortoplacista, de “contar medias verdades”, y de adoptar las soluciones más rápidas pero no las más meditadas.
La decisión de reformar Tudela Este y ampliar (duplicar) Tudela Oeste para que tenga cabida para nuevos servicios y crear una “manzana sanitaria” ha sido algo muy meditado. Hace un año se creó un grupo de trabajo para estudiar la reordenación de los servicios sanitarios de nuestra ciudad. Dicho grupo estaba formado por la dirección del Área de Salud, los responsables de los servicios sanitarios que desarrollan su labor en el núcleo urbano de Tudela (equipos directivos de los dos centros de salud, responsables de Rehabilitación, CASSYR, Urgencias, Salud Mental, Prestaciones y Conciertos…), personal del área de ordenación del territorio del Ayuntamiento, y yo mismo en calidad de alcalde. Tras varios meses de trabajo, este grupo desarrolló un informe explicando la situación actual de cada uno de los servicios sanitarios y las necesidades que preveían para los próximos 10-15 años. Se tuvo en cuenta también la previsión de crecimiento demográfico, las comunicaciones y accesos, y la disponibilidad de parcelas en las que se podrían acometer nuevas edificaciones.
Tudela Este (Santa Ana) cuenta con 22.000 tarjetas sanitarias y Tudela Oeste (Gayarre) con 13.000, lo cual se corresponde con la media de los centros de salud de las ciudades, que suelen atender a más población que los núcleos rurales. Así, en Pamplona son varios los centros de salud que cuentan con entre 20.000 y 25.000 tarjetas sanitarias, como Chantrea, Rochapea, San Juan, Mendillorri, Ensanche II… Hay poblaciones con un tamaño similar al nuestro que también tienen dos centros de salud, como Don Benito (36.975 habitantes), Errentería (39.381), o Soria (39.118), que no tiene tres centros de salud como el columnista afirmaba; en Soria capital hay dos centros de salud, y ambos atienden a más de 20.000 personas. Cierto es que habrá ciudades que tengan 3 centros de salud, pero si bien el número tarjetas sanitarias por centro es un dato importante a tener en cuenta, centrar únicamente en eso el debate resulta muy simplista. Hay que valorar también las ventajas que suponen disponer en un mismo centro de varios recursos y equipos profesionales, la adecuación de las instalaciones, distancia a los centros de Salud, y previsiones de crecimiento demográfico.
Estamos todos de acuerdo en que los dos centros de salud de Tudela precisan ser reformados y ampliados, dado que que no se ha realizado ninguna mejora significativa en los mismos prácticamente desde su edificación hace más de 3 décadas. Así, próximamente se va a acometer la reforma de Tudela Este por valor de 1’7 millones de euros, lo cual mejorará entre otras, las infraestructuras de las urgencias extrahospitalarias. Tras dicha remodelación, y trasladando algunos de los servicios comunitarios a Tudela Oeste, quedará un centro reformado y con espacio suficiente para Atención Primaria, Urgencias, y los servicios que allí queden. Además, dicho centro se encuentra a una distancia de desplazamiento adecuada de la zona del Barrio de Lourdes con mayor densidad de población, que son las calles situadas entre la Avenida del Barrio y la calle Lor.
En la próxima década se espera un crecimiento poblacional en Tudela bajo, que se situará principalmente en el barrio del Queiles y con aumento de la densidad poblacional del centro. Atendiendo a esta circunstancia y a las carencias de espacio en Tudela Oeste, parece una excelente solución duplicar el espacio disponible para este centro de salud. Para ello se incorporará como centro sanitario el antiguo convento anexo y el edificio que actualmente ocupan los servicios sociales, que se trasladarán a los antiguos juzgados aprovechando también ese espacio céntrico y desaprovechado actualmente. Esta ampliación permitirá incrementar el espacio disponible para Atención Primaria y Salud Mental, servicio que prevé crecer en los próximos años con el iniciado desarrollo de Salud Mental Infanto-Juvenil. Además, se incorporarán otros servicios procedentes de Tudela Este como CASSYR y Prestaciones y Conciertos. De esta forma quedará una “manzana sanitaria” accesible al casco viejo y a su vez abierta al Queiles, cuyo parque pronto será una realidad y supone la zona de crecimiento a corto plazo de nuestra ciudad.
La anunciada reordenación de los servicios sanitarios comunitarios en Tudela ha sido fruto de un estudio meticuloso y completo por parte de la administración y de profesionales de la salud. Estas reformas y ampliaciones se alinean con la estrategia emprendida de rehabilitar y revitalizar el casco antiguo a la par que se potencian servicios públicos de cercanía.
Creo que la cuestión no es si Tudela necesita un tercer centro de salud, sino qué necesita nuestra ciudad para dar una atención sanitaria de calidad a su ciudadanía y a los vecinos de la Ribera que acuden a diferentes servicios. Según concluyen aquellos que han estudiado con detalle la situación, estas ampliaciones y reformas garantizan unas infraestructuras sanitarias óptimas para los próximos 10-15 años. Adelante con ello entonces.
Esto y sólo esto es lo importante pero también quisiera añadir que sería muy sano que el debate político no entre en falsedades como las afirmadas por el autor del CITADO artículo, y que nadie tire por tierra el trabajo de planificación de los profesionales de salud de Tudela tan sólo para desacreditar al alcalde. La irresponsabilidad no la pagan quienes escriben líneas o bien con desconocimiento o bien con mala intención. La paga el conjunto de la ciudadanía que adolece de propuestas congruentes, solventes y sólo encuentra mensajes simples que buscan generar un clima de insatisfacción y crispación generalizada que no construye ciudad.
Tras años de parálisis lo concreto es que la atención primaria de Tudela va a ser planificada y ejecutada para los próximos 10-15 años, eso sí es una buena noticia.
Eneko Larrarte Huguet
Alcalde de Tudela