El electricista tudelano Santiago Yanguas Burgaleta reconoce que la suspensión de las Fiestas de Santa Ana le produce una gran tristeza. “Las esperas casi un año con muchas ganas y alegría, pero este año por las circunstancias es inevitable suspenderlas y así debe ser por el bien de todos”, indica.
Este año, por lo tanto, los días de fiesta serán laborables. “Trabajaré todos los días, a excepción del 24 de julio que intentaré almorzar con un pequeño circulo de personas. El sábado 25 es mi santo y hubiera sido el 80 cumpleaños de mi padre y me acordaré mucho, pues nos reuníamos toda mi familia para comer y lo echare mucho de menos. En cualquier caso, me iré a comer con una de las personas que más quiero en este mundo. El día, 26 Santa Ana, también aprovecharé para descansar pues el 27 seguramente reanudaré mi trabajo”, comenta.
A pesar de la suspensión de las fiestas, Santi Yanguas reconoce que intentará reunirse con un pequeño circulo de amigos y familiares. “Dentro de lo que se pueda en esas fechas, pues ya vemos que las normas cambian de un día para otro, según evoluciona esta pandemia,y tener alguna comida,almuerzo para al menos charlar un poco y desconectar de la rutina de todo el año”.
Este popular electricista confiesa que echará de menos actos como el cohete, la imposición del pañuelo a la Reja de Santa Ana, los almuerzos y comidas multitudinarias, ir a las ferias, de Peñas, a los toros. “Todo… pues a mi me gusta ser parte de la fiesta y no entro en casa ni con una soga”, comenta entre risas.
Yanguas es presidente de la Peña La Jota de Tudela y, pese a la tristeza por la suspensión de las fiestas, quiere ver el lado positivo de esta situación. “Hay que sentir alegría por seguir todos bien,luchando y trabajando para que esto se pase y que el año que viene podamos disfrutarlas con más ganas”.
Por último, lanza un mensaje de unidad, esperanza y agradecimiento. “Entre todos tenemos que combatir esta pandemia, siguiendo los consejos sanitarios poniéndonos la mascarilla, respetando la distancia Social y lavado de manos por nuestro bien y, sobre todo, por los que se dejan la vida por nosotros todos los días como son los sanitarios, policías,personal de limpieza etcétera”. concluye.