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Rubén Gil apenas lleva un mes en el C.D. Corellano pero ya ha vuelto a sentirse futbolista, tras su abrupta salida del Lourdes. En el equipo rojillo lo han recibido como agua de mayo y ya se siente totalmente integrado. Además, cuenta con la confianza plena del entrenador, Víctor Cuartero. «Rubén tiene muchas cualidades, una de ellas es la polivalencia porque puede jugar de lateral, extremo o media punta ya que son posiciones que conoce a la perfección. Es muy intuitivo y rápido para jugar entre líneas, además tiene gran visión de juego y una buena finalización. También es un jugador que trabaja mucho sin balón y tiene en su velocidad otra gran ventaja», asegura Cuartero.
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