La plaza exterior de la Residencia de Ancianos San Gregorio de Buñuel se encuentra, desde el lunes 5 de septiembre, inmersa en un proceso de remodelación integral mediante el cual, principalmente, se persigue la eliminación de todo tipo de barreras arquitectónicas para mejorar la accesibilidad. Todo ello con el objetivo de crear un lugar de encuentro entre los residentes y sus familias mucho más amable, cercano y moderno que, además, servirá para la realización de diferentes actividades al aire libre y como zona de paseo. Además, facilitará las actuaciones ante cualquier emergencia como es el caso de evacuaciones médicas.
El Ayuntamiento continúa así con su apuesta por mejorar la vida de las personas mayores, pues en estos años se ha procedido a la implantación del Modelo de Atención Centrado en la Persona y se ha instalado climatización en la primera planta de la residencia para combatir las altas temperaturas estivales
La ejecución de las obras, que tiene un presupuesto de 165.000 euros, está a cargo de la empresa IDOI Construcción, adjudicataria tras el correspondiente proceso de licitación. Esta empresa desarrolla su actividad en Navarra, La Rioja, País Vasco y Aragón, trabajando en obras de diferente entidad tanto para clientes públicos como privados. De hecho, ya ha ejecutado obras en el municipio como la Plaza de la Paz y la pavimentación de algunas calles.
“Se trata de una de las acciones más importantes de las que se van a desarrollar en este 2022”, explica la alcaldesa Mayte Espinosa quien, además, recuerda que desde el Ayuntamiento se sigue apostando por el bienestar de las personas mayores. “Es algo que hemos tenido claro desde el comienzo de la legislatura en el 2019: ellos son nuestra memoria y cuidarlos está dentro de nuestras prioridades”, recuerda.
La implantación en la residencia San Gregorio del denominado Modelo de Atención Centrada en la Persona va en esa línea. “Es un modelo que desde hace tiempo se venía instaurando en muchas residencias de Navarra y en Buñuel, como se dice coloquialmente, ‘nos hemos subido al carro’ porque queremos que la residencia sea realmente el mejor hogar posible”, enfatiza Espinosa.
Esta obra de rehabilitación integral de la plaza será posible, en gran medida, gracias a una enmienda parlamentaria de 100.000 euros y que, tras ser presentada por el Grupo Parlamentario de Geroa Bai, fue aprobada en los Presupuestos Generales de Navarra de 2022.
La remodelación de la plaza, sin cambios desde mediados de los años 80, era una petición de residentes y familiares por las dificultades que su pavimento y organización implicaba tanto para pasear como para afrontar las emergencias
Además, esta misma formación política también apoyó un año antes, con otra enmienda por valor de 40.000 euros, el otro proyecto que viene mejorando la vida de los residentes: la instalación de un sistema de climatización en la primera planta de la residencia para paliar los efectos del calor durante la época estival. Esta obra supuso una inversión total de 116.000 euros y, ante las fuertes olas de calor de este verano, se ha revelado como muy necesaria y acertada. “Gracias a ello nuestros residentes han pasado un verano de lo más agradable en su hogar, pues al final lo que buscamos es que vivan con el mayor confort posible y bien atendidos”, destaca la alcaldesa.
Las obras en la plaza de la residencia cuentan con un plazo de ejecución de dos meses, por lo que, para mediados de noviembre, en caso de no haber contratiempos de última hora, los residentes y sus familiares ya estarán disfrutando y haciendo pleno uso de este espacio renovado.
“Era una petición de muchos, residentes y familiares”
Desde el interior de la Residencia San Gregorio, y pese a las molestias e incomodidades que genera toda obra, el sentir general es de alegría. Según manifiestan desde la dirección, la necesidad de renovación y cambio en la plaza era palpable. Tanto los residentes como los familiares lamentaban los obstáculos y dificultades que había para pasear cómodamente con una silla de ruedas o un andador, así como la falta de accesibilidad cuando hay emergencias (las evacuaciones debían darse por el lateral, pues en la zona central solo había escaleras).
“Ellos mismos dijeron que había que mejorar el pavimento, así como la necesidad de rampas y de dar una vida nueva a un espacio tan importante en su vida diaria como es la plaza”, explica Juanma Vergara, director de la residencia, “es ahí, cuando hace buen tiempo, de donde la vida parte y todo fluye, así que ellos han dicho el cómo lo quieren”. Agrega, además, que el objetivo es también que “las personas puedan ser más independientes y autónomas al mismo tiempo que se minimiza cualquier riesgo para darles una vida más confortable”.
Por último, Vergara indica que la clave está en escuchar. “Es fundamental saber para quiénes estamos aquí, ellos nos dicen qué es lo que necesitan, qué quieren y cómo lo quieren”, afirma el director. Por eso, explica, se hacen deliberaciones grupales y se observa cada pequeño cambio del día a día. “Hay que ser flexibles, adaptarse a cada persona y acompañarle en su proyecto de vida. Hay que dar calidad, pero, ante todo, calidez porque ellos y ellas vienen aquí a vivir y a convivir”, concluye.