El colegio Elvira España es el centro de referencia para el Modelo D en Tudela
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El Partido Popular y el PSN-PSOE han coincidido a la hora de exigir al Departamento de Educación una respuesta sobre los criterios que ha seguido a la hora de determinar los colegios de referencia para impartir el Modelo D de enseñanza en euskera en la Ribera. Para ambas formaciones, la elección en Tudela del colegio Elvira España, con modelo British de enseñanza en inglés, es una demostración de la «arbitrariedad» y han llamado la atención que se realice «en los centros donde se imparte con éxito la enseñanza en inglés «lo denota la intención del Gobierno de atacar al PAI», ha denunciado el parlamentario del PP, Javier García.
El parlamentario popular también ha criticado que la elección de los centros de referencia se haya hecho de manera «unilateral», sin el consenso ni de los padres, ni de los equipos directivos, ni de la comunidad educativa en general.
García ha anunciado la petición de una interpelación sobre los criterios de escolarización y preguntas orales al consejero para que dé explicaciones sobre las consecuencias que la implantación del modelo D traerá a los actuales equipos directivos de los centros, así como una moción instando a que se tenga en cuenta la opinión de las APYMAS y de la comunidad educativa a la hora de designar estos equipos. En este aspecto, ha apuntado que el PPN velará para que estos cambios, si procediesen, «no obedezcan a razones ideológicas, como vemos cuando se obliga a los directores a estar en posesión del título EGA en euskera, teniendo en cuenta que el equivalente en inglés nunca se ha exigido», ha dicho.
Críticas socialistas
Por su parte, los socialistas han pedido conocer los informes técnicos con los que se ha sustentado la decisión. «El PSN-PSOE critica la improvisación y la doble vara de medir que vuelve a utilizar el Departamento. Escoge a determinados centros para impartir, si hay demanda, el modelo D, cuando estos centros no contemplan ese proyecto educativo porque no han tenido ocasión siquiera de plantearlo. Y en cambio pone palos en la rueda a los centros que quieren incorporarse al PAI, a pesar de la demostrada demanda que existe y que ha supuesto un incremento de matrícula en la enseñanza concertada ante las incertidumbres y dificultades que se está poniendo para el desarrollo de estos programas».
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