Levantar proyectos cada vez más eficientes y que permiten ofrecer a los clientes viviendas de gran calidad en las que prima la sostenibilidad y el confort es el objetivo con el que trabaja cada día construcciones GCH Garbayo Chivite.
Hace más de una década GCH Garbayo Chivite incorporó en su visión de empresa el compromiso con el medio ambiente y la sostenibilidad en sus proyectos de edificación y construcción.
Marta Garbayo, responsable de la firma recuerda que, según diversos estudios, el ahorro energético que generan este tipo de viviendas se estima en torno al 80% de media respecto a una vivienda convencional. La edificación de viviendas de “consumo nulo” ha dejado de ser una utopía y aplicando los recursos y sistemas que ya se conocen, se llega a viviendas que, incluso, generan mas energía de la que consumen, recuerda.
La firma cirbonera se está convirtiendo en una referencia del sector inmobiliario en Navarra por acometer proyectos que reflejan el compromiso y mentalización por la eficiencia energética. “Para conseguir este objetivo somos conscientes de que, hay que prepararse, realizando una formación continua de los equipos de trabajo de la empresa y estar muy al día ya que se avanza muy rápido en la mejora de los sistemas”, afirma Garbayo.
La responsable de la firma cirbonera asegura que es una apuesta diferencial respecto a los estándares de Promoción de Obra Nueva. Tiene un pequeño coste, señala, “pero a medio plazo” es muy beneficioso para el bolsillo del comprador y para el medio ambiente.
“Cuando planteamos la promoción Merindades Residencial en Tudela teníamos claro que el diseño y la calidad de nuestras viviendas apostaba por la eficiencia para asegurar una menor necesidad energética en el futuro. Lanzamos la promoción con posibilidad de 2, 3 y 4 dormitorios, y nos hemos encontrado que nuestros clientes han optado por viviendas espaciosas, con tres y cuatro dormitorios y amplias zonas comunes”, explica.
La principal ventaja del proyecto de 17 viviendas de Merindades Residencial la aporta su sistema de construcción y de envolvente que lo aíslan acústica y térmicamente. A ello se suman apuestas en materia energética como el recuperador de calor y la aerotermia combinada con un suelo radiante-refrescante. Su uso combinado reduce de manera notable la energía que necesita la vivienda para calentarse en invierno y refrescarse en verano, además de otros beneficios directos como disponer de una mejor calidad de aire en el interior de la vivienda con un nivel óptimo de oxígeno y libre de ácaros, polen y otras impurezas, o conseguir mantener la vivienda en unos niveles óptimos de bienestar y confort con muy poco consumo energético.
Todo este sistema de eficiencia se sustenta en un sistema de calidad en la construcción en cuanto a aislamientos, ventanas y envolventes, y una orientación eficiente que aprovecha de manera óptima la luz y el calor del sol. “Son viviendas que cuentan con terrazas muy amplias, de casi 20 m2 y techadas, lo que permite aprovecharlas en invierno y en verano. En los meses de invierno, primavera y otoño el sol entra en el interior de la vivienda aportando su calor a través de los grandes ventanales, mientras que, en los meses de verano, con el sol más alto, es el propio techo de la terraza el que sombrea y evita que la luz solar y el calor incida de manera directa en la vivienda”, explica.
“Los distintos gobiernos son conscientes de la necesidad de la mejora de las viviendas y para ello habilitan subvenciones que priman la rehabilitación y que se implanten estos sistemas de mejora energética. Pero también es necesario que estas ayudas primen la Nueva Construcción Eficientemente Energética para que el comprador se motive y valore este concepto a la hora de plantearse la inversión. Con ello se conseguirá que el parque de vivienda nueva sea cada vez mejor y mas eficiente”, asegura.
Este esfuerzo debería implicar también a las entidades bancarias, reclama Garbayo, “que deberían contemplar el plus de una vivienda Eficientemente Energética a la hora de valorar las hipotecas ya que los compradores van a tener un menor gasto en sus consumos. Esto se podría traducir en un mayor porcentaje del préstamo concedido, por ejemplo…, ya que es ahí donde los compradores por muy poquito, a veces, no logran que los números les encajen para optar a la compra de una vivienda nueva de estas características”.