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La parlamentaria de UPN, Maribel García Malo, ha denunciado el fracaso de la política social del cuatripartito que gobierna en Navarra y ha señalado que tras dos reformas «ni han servido para que haya más justicia social ni para que tengamos una sociedad más inclusiva».
La portavoz parlamentaria de los regionalistas en la Comisión de Asuntos Sociales ha valorado negativamente la evolución de las unidades perceptoras de renta en la Ribera, comarca en la que, ha recordado, han pasado de ser 2.043 a 2.471 entre 2015 y 2017, 428 unidades familiares más que suponen un incremento del 21%. «En una coyuntura económica de recuperación y creación de empleo no existe una correlación entre empleo y unidades perceptoras de renta garantizada, el empleo mejora pero los perceptores, lejos de descender, suben», ha indicado.
Para García Malo los datos «corroboran la idea de UPN de que un modelo basado en el subsidio no funciona» y ha reconocido su preocupación de que unas ayudas que deben atender unos momentos y necesidades puntuales «se conviertan en un subsidio que desincentive el acceso al mercado de trabajo».
En este sentido ha recordado la apuesta de UPN en materia social de desarrollar una renta básica asociada a un compromiso compartido entre los beneficiarios y la administración que contemple cuestiones como la búsqueda activa de empleo, el acceso a formación, la escolarización de los menores y el aprendizaje del idioma «acciones que lleven a la inclusión, generen oportunidades y se desarrollen en nuestra sociedad», ha comentado. «Es necesario que el Gobierno de Navarra rectifique, vuelva a un modelo de corresponsabilidad en el que haya acuerdo y compromisos de las personas en su proceso de inclusión».
«La política social está teniendo un impacto bajísimo en la inclusión de las personas»
García Malo ha señalado también el escaso impacto en la inclusión que tiene la política social del Gobierno de Navarra «y el Vicepresidente Laparra se está dando cuenta del fracaso de su modelo» ha indicado la parlamentaria regionalista.
Como ejemplos ha apuntado que en una coyuntura de creación de empleo es ilógico que suban las unidades perceptoras de renta, ha fracasado la política de ayudas a la contratación a personas en riesgo de exclusión que, contando con una partida de 4 millones de euros solo se han empleado 100.000 euros, y entidades sociales como Cruz Roja y Cáritas han denunciado un cambio de tendencia en la atención a personas sin hogar que en 2017 aumentaron un 10,7% rompiendo la tendencia a la baja que existía desde 2013. A ello ha añadido la reciente denuncia del sindicato agrario UAGN que está viendo como personas perceptores de la renta básica garantizada están renunciando a la posibilidad de un empleo.
Sobre si el aumento de perceptores de renta puede deberse a un efecto llamada de las política sociales llevadas a cabo en Navarra, García Malo ha reconocido que UPN no lo constata, ya que el acceso a la renta básica garantizada exige un año de empadronamiento en Navarra y no ha transcurrido este tiempo desde la última reforma «pero sí que vemos, como ve Cruz Roja o Cáritas, que están llegando personas en situación de exclusión y que se están produciendo traslados en zonas periféricas como en las poblaciones que limitan con la Rioja».
Unidades Familiares Perceptoras de Renta Garantizada en la Ribera en las Mancomunidades de Servicios Sociales de Base de la Ribera (Periodo 2015-2017)
Buñuel (Fontellas, Ribaforada, Cortes, Cabanillas y Fustiñana) 200 – 245 – 262 (+19%)
Cascante (Ablitas, Barillas, Monteagudo, Murchante y Tulebras) 229 – 241 – 309 (+35%)
Cintrúenigo (Fitero): 326 – 356 – 360 (+10%)
Corella (Castejón): 314 – 341 – 384 (+22%)
Tudela: 734 – 825 – 863 (+18%)
Valtierra (Arguedas, Milagro, Cadreita, Villafranca): 220 – 249 -293 (+33%)
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