[ihc-hide-content ihc_mb_type=»show» ihc_mb_who=»4,5,6,7,8″ ihc_mb_template=»2″ ]Las Comunidades de Regantes de la margen derecha del Ebro en Navarra han decidido pasar a la acción para reclamar la ejecución de la segunda fase del Canal de Navarra que debe de unir la laguna de Pitillas con la de Lor en Ablitas y han suscrito un manifiesto en el que reclaman y defienden esta obra como apuesta de futuro para la Ribera de Navarra.
Al documento se han sumado un total de 16 entidades, las Comunidades de Regantes de Ablitas, Barillas, Huertecilla Pedriz, Monteagudo, Tulebras, Cascante, Murchante, Desolado de Lor, Fiitero, Corella, Ombatillo, Camponuevo de Cascante, Murchante, Saso Pedriz, Huertas Mayores de Tudela y Cintruénigo y se espera que al mismo se adhieran también las comunidades de la margen izquierda. Asimismo, han anunciado los responsables de la iniciativa, el manifiesto se va a trasladar para su aprobación y conocimiento a ayuntamientos y agentes económicos y sociales. «Es el momento de hacer piña y unirnos para reclamar algo que está proyectado y que se nos está negando», ha señalado Enrique Castel-Ruiz, presidente de la Comunidad de Regantes de Huertas Mayores.
Manifiesto de las Comunidades de Regantes
MANIFIESTO A FAVOR DEL CANAL DE NAVARRA EN LA RIBERA (MARGEN DERECHA)
Las Comunidades de Regantes firmantes, todas ellas enclavadas en la futura zona regable de IIª Fase del Canal de Navarra están viéndose sorprendidas con una serie de informaciones acerca del futuro del Canal de Navarra y, más concretamente, de su IIª Fase.
Estas Comunidades de Regantes han cumplimentado una serie de encuestas, a través de la empresa pública INTIA, dónde, entre otros, se han actualizado datos tales como número de partícipes, hectáreas a regar, cultivos actuales y alternativos, suficiencia o no de las actuales concesiones o alternativas de otras nuevas en base a las posibilidades existentes.
Entendemos necesaria la revisión y actualización de datos y características referentes a las respectivas Comunidades de Regantes para poder adecuar, en un momento dado, sus necesidades a las cambiantes circunstancias que el paso del tiempo provoca; lo que ya no podemos entender es que las mencionadas encuestas puedan servir para poner en entredicho o, aún peor, justificar la paralización del Canal de Navarra impidiendo su llegada a la Ribera.
No menos sorprendente resulta a estas alturas, que se justifique todavía, la necesidad de elaborar nuevos informes de la IIª Fase del Canal. Los informes ya se hicieron, y la planificación total de la obra se realizó conforme a los mismos. En ellos se exponían una serie de demandas y necesidades de agua en toda Navarra, fundamentalmente en la Ribera y muy especialmente en las poblaciones de la margen derecha del Ebro. Y todo ello se avaló con sus correspondientes estudios, análisis, comparativas y proyecciones a futuro, tal y como se desprende del informe emitido por la Cámara de Comptos de Navarra en septiembre del pasado año.
Cuestionar ahora, finales de 2016, la necesidad del Canal de Navarra está totalmente fuera de lugar y es por eso que estas Comunidades de Regantes quieren manifestar su inequívoca apuesta por el Canal de Navarra, como la única posibilidad cierta y real de poder mantener la esperanza de que nuestras poblaciones puedan desarrollarse en el futuro.
El sólo atisbo de que se pretenda volver a la casilla de salida en virtud de la necesidad de nuevos estudios es quitarnos el futuro y la esperanza. Es condenar a esta parte de Navarra privándola del bien más preciado: el agua, con el agravante de que se nos quite algo de lo que, por fortuna, Navarra dispone. Para eso se construyó el Pantano de Itoiz; proyectado en su día conjuntamente con el Canal, el primero no se entiende sin el segundo, y el segundo constituye el objeto del primero. Ahora, con el Pantano de Itoiz concluido, el Canal de Navarra abasteciendo poblaciones y regando parcelas en una amplia zona de Navarra y extendiéndose con su ampliación de la Iª Fase por la zona media no puede paralizarse. Ni tan siquiera podemos consentir que pueda barajarse dicha posibilidad. Después de la Iª Fase, y de su ampliación viene la IIª Fase. Ya nos toca.
No hay otras alternativas. No se han encontrado en los últimos veinticinco años porque sencillamente no existen. El binomio Itoiz-Canal de Navarra se proyectó con visión de futuro, pensando en las generaciones venideras. Éstas son las verdaderas beneficiarias de esta obra, y ésa, nuestra responsabilidad.
Si sólo fuese la agricultura de esta zona de Navarra la destinataria del agua del Canal de Navarra podríamos entender que, por circunstancias sobrevenidas, se revisase el Proyecto o se introdujesen algunas modificaciones; pero no es así. No es sólo la agricultura; agua de boca, usos industriales, recreativos… también necesitan y esperan el Canal.
Sin el Canal de Navarra, volvemos a repetir, no tenemos futuro.
Por todo ello,
Queremos MANIFESTAR nuestra firme determinación en favor de la continuidad del Proyecto del Canal de Navarra en su IIª Fase, desde la Laguna de Pitillas hasta la Laguna de Lor en Ablitas.
Debemos señalar que nos encontramos en una zona más que deficitaria de agua y, por no existir otras alternativas reales, CONSIDERAMOS que el Canal de Navarra es la única solución posible para mejorar y modernizar los regadíos actuales y acometer otros nuevos.
NECESITAMOS el agua del Canal, y no sólo para nuestras explotaciones. El Canal de Navarra nos garantiza una calidad de agua (de la que ahora carecemos) para el consumo humano y la industria agroalimentaria. En definitiva, las Comunidades de Regantes necesitamos agua, pero nuestras poblaciones y nuestros vecinos también.
Si efectivamente “el agua es vida”, déjennos VIVIR.
Tudela, 2 de diciembre de 2016. [/ihc-hide-content]