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La consejería de Cultura del Gobierno de Navarra va a poner en marcha este sábado un ciclo de visitas guiadas a las obras de restauración de la Puerta de Juicio de la catedral de Tudela que van a permitir a los ciudadanos disfrutar como nunca del espectáculo escultórico que forman las 115 dovelas y las 8 claves que conforman la portada principal de la Catedral de Tudela en la que se representa el Juicio Final con los réprobos condenados en el Infierno y los bienaventurados que se han ganado en el Cielo.
Este programa de visitas se va a prolongar durante todo el mes de octubre, los sábados y domingos por la mañana, en 5 turnos a las 10,00h., 10,45h., 11,30h., 12,15h. y 13,00h. Cada grupo, de un máximo de 10 personas, podrá disfrutar de una perspectiva única de la Puerta del Juicio durante aproximadamente media hora. Las visitas se desarrollarán aprovechando el andamiaje que en estos momentos cubre la portada, por lo que para acceder será necesario tener más de 14 años, no tener problemas de movilidad y llevar calzado cómodo que permita a los visitantes subir las escalares y transitar por las pasarelas dispuestas para la obra.
El acceso a la visita se realiza mediante una inscripción previa en la web que ha dispuestos el servicio de patrimonio del Gobierno de Navarra. (http://visitas.fcpatrimoniodenavarra.com/visitas-tudela/).
Aparición de restos de policromía
Los trabajos de restauración que se llevan a cabo desde el pasado mes de junio se desarrollan según los plazos previstos y han llegado a su meridiano. La consejera de Cultura del Gobierno de Navarra, Ana Herrera, y el alcalde de Tudela, Eneko Larrarte, han podido conocer a lo largo de una visita el resultado de la intervención que se ha realizado en el rosetón, el pasadizo a la torre y la cornisa de la portada, posibles fuentes de humedad y sales que afectan al monumento, y los primeros trabajos que han comenzado a realizarse sobre los elementos escultóricos de la propia puerta.
Los responsables de la restauración han realizado un estudio de las sustancias que cubren los sillares y las esculturas, formada por una capa gruesa de polvo y barro y una costra negra compuesta de cal y yesos una de cuyas causas está en la polución que ha afectado al monumento. Bajo esta capa se han localizado restos de policromía que se han confirmado en las arquivoltas, donde también se han realizado algunas catas aleatorias que han desvelado el color de los rostros de algunas figuras.
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