La semana pasada se aprobaron los presupuestos de Nafarroa para el 2022. Los días anteriores, en la Ribera, con el fin de esconder el bochorno de su incapacidad para conseguir un solo céntimo en inversiones para la Ribera, UPN nos deleitó con el bombardeo continuo de enmiendas que habían presentado a los presupuestos. Por supuesto, también hubo menciones públicas a la tan ansiada, y desinflada, Carta de Capitalidad para Tudela, cuya necesidad no se sustenta después del cambio en el modelo de financiación local y la pérdida de la misma por parte de Iruña. La retorica general fue, una vez más, la falta de inversión y el abandono de la Ribera.
La realidad es que frente al pufo de 400 millones que iban a dejar las enmiendas presentadas por Na+ en las arcas públicas y su irresponsabilidad por pedir partidas presupuestarias para realizar proyectos que ni siquiera están escritos. EH Bildu, mediante la responsabilidad, el diálogo y la negociación ha conseguido 4,7 millones para la Ribera, frente a los 0€ conseguidos por Na+. Solamente el nuevo modelo de financiación local logrado por EH Bildu ha permitido que la financiación de la que disponen los ayuntamientos de la Ribera aumente en 3,8 millones de euros.
Además de incluir en los presupuestos una partida de 400.000€ para el proyecto de la segunda fase de ampliación de la UCI y nuevos quirófanos para el Hospital de Tudela; también hemos apostado por contratar profesionales de psicología para Atención Primaria, con la intención de paliar las secuelas que la pandemia está dejando, especialmente en las más jóvenes. Somos conscientes del cansancio y la precariedad del personal sanitario, por eso hemos incluido en los presupuestos una partida para la contratación de profesionales de refuerzo en Atención Primaria en el área de Tudela.
Mediante nuestras enmiendas a los presupuestos, hemos logrado que se licite el proyecto de ampliación del Centro de Salud Gayarre de Tudela con 200.000€, tal y como EH Bildu prometió que haría en la mesa redonda organizada en noviembre por la Asociación de Vecinos del Casco Viejo de Tudela. Así como el reacondicionamiento de las orillas del rio Queiles a su paso por Cascante, generando una vía verde para el disfrute de las vecinas y vecinos.
Nuestra abstención a los presupuestos de Navarra ha permitido también que el próximo año comience la construcción del nuevo Centro de Salud de Cascante por un valor de 4 millones de euros, que finalizará en 2023. También se hará una importante inversión de 1,8 millones de euros en la adecuación y el equipamiento del Centro de Salud Santa Ana de Tudela. La obra del área de Hemodiálisis del Hospital de Tudela contará con 2,2 millones de euros para su finalización y comenzarán las obras del área de Farmacia Hospitalaria con un valor total de 1,3 millones de euros.
Además de estas importantes inversiones para la Ribera, desde EH Bildu hemos logrado compromisos y avances en servicios sociales, transición energética y sanidad, que en nuestra opinión son los pilares de la Navarra del futuro. Las negociaciones han hecho que logremos la gratuidad del ciclo 0-3 para las familias con rentas inferiores a 18.000€, así como que las pensiones mínimas aumenten y que en Navarra se sitúen en los 800€ como paso intermedio en el objetivo de que lleguen a los 1.080€. Hemos llegado a un acuerdo para la creación de una empresa pública de transporte sanitario y el mapa solar para toda Navarra; así como el aumento en 670.000€ de las ayudas para la enseñanza en euskera para adultos, con el objetivo de alcanzar la total gratuidad en toda Navarra.
No son nuestros presupuestos, pero acabamos el año con la sensación de haber contribuido a mejorar la vida de nuestras vecinas y vecinos. Con la sensación de que mediante la negociación con el Gobierno de Navarra somos capaces de hacer que la Ribera avance, y lo seguiremos haciendo.
EH Bildu Ribera