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Alrededor de 300 personas secundaron la XXXII edición de la Marcha al Polígono de Tiro convocada por la Asamblea Antipolígono de las Bardenas que recorrió la distancia que separa el centro de acogida a visitantes del Parque Natural en los Aguilares y las puertas de las instalaciones militares.
La edición de este año ha tenido un recuerdo especial para Gladys del Estal, joven activista antinuclear que murió de un disparo en la cabeza en el transcurso de una sentada en el Puente del Ebro hace 40 años. Como homenaje, varias personas han declamado versos de diferentes autores y autoras de contenido pacifista y ecologista, han colocado una foto en la pancarta y han depositado claveles rojos.
Tras este momento, Milagros Rubio,portavoz de la asamblea antipolígono, ha tomado la palabra para animar a los manifestantes a mantener viva la reivindicación pacifista «esperando a que un día se den las condiciones propicias para lograr, por fin, el desmantelamiento del polígono de tiro». Tanto Rubio como Eduardo Navascués, también portavoz de la Asamblea, han denunciado el aumento de la frecuencia de los bombardeos con fuego real en el polígono de tiro. «Motivos ecologistas, antimilitaristas, y de preocupación por la seguridad de nuestras gentes y entornos tanto en Navarra como en Aragón, refuerzan nuestra reivindicación. Rechazamos el uso de la violencia como forma de resolución de conflictos, y apelamos al diálogo, a la paz y a la diversidad cultural. Queremos recuperar las Bardenas medioambientalmente y hacer de ellas un territorio referente de paz y convivencia», han recordado.
También han intervenido en el acto representantes de la Plataforma No a la Guerra de Ejea y pueblos que han vuelto a recordar los peligros que el polígono suponen también para los pueblos aragoneses colindantes al polígono de tiro y han criticado las guerras y los sufrimientos que provocan.
Parque Nacional
La Asamblea Antipolígono recuerda que las Bardenas están consideradas en la actualidad como uno de los hábitats esteparios más importantes de Europa al que la existencia del polígono de tiro está privando de convertirsen en Parque Nacional, denuncian. «Desde hace algún tiempo se está valorando la necesidad de reconocer a un territorio estepario. Como primer candidato a esta figura se valoró el Parque Natural de Bardenas, pero inmediatamente se tuvo que abandonar la idea porque en un Parque Nacional no se contempla la actividad militar».
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