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Inma Benítez se lanza a su segunda aventura editorial con «Los cuentos de mi niña» una obra intensa, potente y dura en la que la autora comparte su experiencia vital para abordar los temas de la anorexia y los abusos a menores.
Benítez reconoce que en esta obra se aleja del tono habitual de «Los cuentos de Minina» y «A todos mis amores» para centrarse en la denuncia. A lo largo de sus 42 páginas la autora recopila una treintena de poemas y relatos que, a modo de fotografía, repasan los distintos estados anímicos de los episodios de esta enfermedad y que dan pie a tratar el tema de los abusos en la infancia. «Me han dicho que es un libro duro, aunque yo no lo veo así. Están escogidos los textos que he considerado mas significativos, duros para quien los lee desde fuera pero no para mí que tengo asumido ese sentimiento y creo que superado». reconoce.
El proyecto que ahora ve la luz siempre ha estado en la mente de la escritora tudelana. Asume que compartir su experiencia vital es desnudarse ante el lector de una manera muy diferente a lo que ocurre con la poesía. «Mi propósito es que el libro pueda acompañar a gente que puede estar pasando por esta misma situación y que no encuentra salida. Y lo hago a través de un relato anímico de la situación, porque en la mayoría de las ocasiones el entorno se centra en el estado físico, olvidando que para cuando alguien ha perdido peso el deterioro anímico ya es enorme».
Para la edición de la obra, Inma Benítez ha contado con muchas manos voluntarias, desde la editorial, La Cartonera, que aporte al libro una imagen muy especial, a las ilustraciones de los relatos, donde ha contado con la aportación de los alumnos de la Escuela de Arte y Superior de Diseño «Antonio López» de Tomelloso. Todo ello va a permitir a la autora destinar la venta del libro a alguna entidad social.
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