El Gobierno de Navarra ha decidido cerrar el interior de todos los establecimientos de la hostelería navarra durante 15 días a partir de este sábado 23 de enero, en la enésima clausura del sector más criminalizado de largo desde que arrancara la crisis del Covid‐19. Calificándola como “medida quirúrgica y selectiva”, el Ejecutivo navarro vuelve a castigar a miles de empresas hosteleras que no levantan cabeza. La gran mayoría de estos establecimientos no cuentan con terraza, por lo que esta medida obliga a un nuevo cierre en masa del sector.
Los últimos datos provistos por el Ministerio de Sanidad hablaban de que apenas el 2% de los contagios totales de coronavirus se producen en establecimientos de hostelería. Estos datos “demuestran que cerrar la hostelería no sólo no es la solución a la propagación del virus sino que tiene efectos contraproducentes en la evolución de la pandemia, ya que aboca a otro tipo de encuentros donde el nivel de contagio es mucho mayor. La hostelería es la alternativa controlada y segura a otro tipo de reuniones sociales”. En esta línea se manifestó ayer la ministra de Política Territorial y Función Pública, Carolina Darias, quien en entrevista en el programa Más de Uno de Onda Cero, afirmó que “alrededor del 80% de los contagios en Navidad se ha producido en el entorno familiar”.
En un sector en el que se han tomado las medidas de seguridad e higiene más estrictas y diligentes, no se han identificado más casos que en otros como el industrial, el del comercio o el transporte público. Pero al que se analiza con luz y taquígrafos y se criminaliza de manera sistemática es al sector hostelero. Deseamos un trato equitativo y restricciones basadas en datos.
La interpretación de los datos de las propias CCAA tampoco deja lugar a dudas. Ante modelos de gestión muy dispares, como puede ser el caso de la Comunidad de Madrid, que ha apostado por la contención del virus sin ahogar la economía, o Cataluña, que optó por el cierre total, los datos demuestran que las curvas son paralelas, sin que el cierre de la hostelería haya supuesto una contención del virus. Lo mismo ha sucedido en otras CCCAA como Castilla León y Andalucía. En el caso de Cantabria, tras dos meses y medio con los interiores cerrados, la tasa de contagios ha subido un 34%.
Otro ejemplo es Alemania que con la hostelería cerrada desde noviembre los contagios no han parado de aumentar.
La Asociación de Hostelería de Navarra englobada en la CONFEDERACION DE HOSTELERÍA DE ESPAÑA CEHE exige una rectificación por parte del director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias (CCAES), Fernando Simón, quien durante una rueda de prensa celebrada hace dos días afirmó que “sé que no es popular, pero la medida que ha tenido un impacto mayor ahora mismo en el control de la transmisión ha sido el cierre de los bares”. Esta afirmación no sólo es del todo falsa según demuestran los propios datos del Ministerio de Sanidad y de las CCAA, sino que pone de manifiesto una absoluta falta de responsabilidad, al no tener en cuenta el fuerte impacto que pueden tener sobre un sector motor de la economía nacional. Y lo dice alguien que afirmó que las mascarillas no eran necesarias…. En Navarra se ha demostrado que con la hostelería abierta, primero las terrazas y luego el 30% de los interiores, no solo no ascendían los contagios sino que descendían, y no ha sido hasta la llegada de las Navidades y sus consecuentes reuniones familiares en domicilios que ha vuelto a subir la curva de contagios.
Otro dato que demuestra que es un sector seguro es el dato de la escasa incidencia de contagios entre los trabajadores del sector, menor incluso que otros muchos sectores, ya que se si tratase de un sector inseguro los trabajadores mayoritariamente hubiesen estado contagiados.
Este nuevo mazazo a la hostelería supone un cierre generalizado de los establecimientos en nuestra Comunidad, ya que la mayoría de ellos no disponen de terraza para sus clientes. Una nueva bajada de persiana que va a ahondar en la grave crisis que arrastra el sector tras un catastrófico 2020 trufado de restricciones continuas.
Y una de arena…; el nuevo paquete de ayudas de 10 millones que el Gobierno de Navarra pretende destinar al sector hostelero. Desde la Asociación de Hostelería y Turismo de Navarra acogemos con positividad aunque con prudencia este anuncio, e incidimos en que es capital que estas ayudas lleguen a los establecimientos de forma ágil y de forma generalizada ya que las anteriores apenas llegaron al 50% de las empresas, para que sirvan de pequeño respiro a un sector que encara 2021 arrastrando una profunda crisis, con un horizonte pintado de incertidumbre y con el anhelo de que la vacunación en Navarra marque muy pronto el porvenir de nuestro sector. Acogemos con agrado la propuesta de la Consejera de Hacienda para colaborar en la mejora de la normativa reguladora de las ayudas.
Y otra aportación de la Asociación que no ha sido ni planteada desde el Gobierno de Navarra es la ventaja de los establecimientos de hostelería al disponer de instalaciones de ventilación, tanto natural como forzada, que junto a los medidores de CO2 permitiesen ahondar en la seguridad de los interiores de los establecimientos de hostelería.
Asociación de Hostelería y Turismo de Navarra
Otros artículos de interés:
Ni más justo, ni más sencillo. Es discriminatorio, por Tradisna