En la recta final de la legislatura es pertinente hacer balance de las actuaciones que el Ayuntamiento de Tudela ha llevado a cabo en el Casco Antiguo durante los últimos años. El resultado no puede ser más descorazonador. Reconociendo los problemas ocasionados por la pandemia, se ha desaprovechado la ocasión para buscar y diseñar nuevos proyectos sin tener que salir de los despachos. La AAVV del Casco Antiguo denuncia la falta iniciativa, el desprecio a la colaboración, el oscurantismo y el total abandono de este barrio.
Los dos primeros años de la legislatura fueron de desconcierto, de pasar la apisonadora en lo realizado anteriormente. Han desaparecido todas las Mesas colaborativas que aportaban propuestas e ideas que surgían de distintos sectores de la ciudadanía. La AAVV apenas se ha reunido con un par de concejales, que, a título individual, y por cortesía, han escuchado las peticiones de la Asociación. Pero la evidencia demuestra que no ha habido receptividad; al contrario, conscientes que son ellos los que marcan la hoja de ruta y que deciden, evidentemente, lo que se ha de hacer no han admitido avance alguno. De esta manera se ha optado por una gestión personalista, impositiva e impermeable.
Si se repasa cuáles han sido las actuaciones realizadas en el Casco Antiguo encontramos la colocación de la fibra óptica. El Ayuntamiento autoriza y una empresa coloca. Pero el cableado se ha realizado por las fachadas, sin ningún miramiento en el aumento del cables, que ya era muy grande de por sí. Sin plantearse el soterramiento progresivo de los mismos. Lo fácil y rápido ha sido la autorización. El pensar en el empobrecimiento de la imagen de las fachadas es lo de menos.
Evidentemente que se ha puesto en marcha el Proyecto del Horno Coscolín, financiado por Nasuvinsa, del Gobierno de Navarra, para lo que el ayuntamiento ha aportado menos de un 5% del presupuesto. El aparcamiento de la calle Terraplén se inició la anterior legislatura y en la presente únicamente se ha ampliado, que está bien; pero no se puede considerar que haya sido la mejora de esta zona iniciativa suya. Por otro lado, se han abandonado otros proyectos importantes como el del Cerro de Santa Bárbara.
En noviembre de 2021 la AAVV del Casco Antiguo organizó un debate público sobre la necesidad de ampliación del Ambulatorio de Atención Primaria Tudela Oeste, en la calle Gayarre. En esta mesa redonda estuvieron representantes de todo el arco parlamentario navarro, incluida Irene Royo de Navarra Suma, que gobierna en el Ayuntamiento de Tudela en la actualidad. Todos los grupos políticos se comprometieron a apoyar esta rehabilitación; pero, como siempre, al final ni se ha licitado la obra ni se han iniciado las mismas. Al final parece que lo que prima es quién se pone la medalla en lugar de mejorar las necesidades de los ciudadanos.
En enero se aprobó en el Ayuntamiento una moción de la AAVV con una serie de mejoras necesarias para el barrio que no se están ejecutando: aumento de la peatonalización; control de acceso a la zona para no residentes mediante cámaras colocadas hace seis años; mejora en la recogida selectiva de basuras y de la ubicación de los contenedores; control de colonias felinas, palomas, cigüeñas y de los excrementos de perros; aumento de las ayudas para rehabilitar los edificios abandonados privados; adecentamiento de los solares públicos; regulación de lugares saturados de ruido (con un aumento evidente de terrazas); incremento de zonas verdes…
Hablan de continuar con proyectos de hace diez años o más, como la rehabilitación de San Nicolás, de Sementales, de la plaza de la Vida, pero que desconocemos y que ojalá se inicien antes de acabar este periodo de cuatro años, aunque se completen en el siguiente.
Si repasamos todo esto concluimos que no ha habido ninguna idea nueva, ninguna propuesta innovadora que se le haya ocurrido al nuevo equipo. En el Casco Antiguo esta legislatura queda en blanco, como un erial. No será recordada por ninguna mejora significativa en el centro de Tudela, que dicen valorar y apreciar.
Todavía quedan unos meses para incluir nuevos proyectos o dotar a los existentes de más dinero en los próximos presupuestos. Hay tiempo para marcar un estilo propio más colaborativo y menos prepotente; que piense en la mejora de Tudela, pero en especial en este barrio antiguo, que sigue, como siempre, olvidado, despreciado y abandonado…
AAVV del Casco Antiguo de Tudela