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El sindicato ELA ha dado a conocer «las malas condiciones laborales» en las que están desarrollando su trabajo el colectivo de celadores del Hospital Reina Sofía de Tudela, una situación que afecta de manera especial a los profesionales que desarrollan su trabajo en el área de urgencias y ha pedido a la comisión de personal del hospital un estudio detallado de los ratios para actualizar la plantilla de celadores y celadoras ante la creciente demanda de usuarios.
El sindicato apunta entre las deficiencias el estado de las camillas, «que han quedado obsoletas y su manejo es difícil y muy deficiente» o las camas «que a pesar de ser nuevas, no funcionan como debieran y ocasionan muchas molestias». Esta situación, denuncia ELA en una nota «está provocando lesiones y accidentes en los trabajadores y trabajadoras además de molestias en los pacientes».
Esta situación, recuerda el sindicato, está unida al aumento de la carga de trabajo. «El servicio de urgencias ha aumentando considerablemente y el colectivo de celadores y celadoras es el único que no ha aumentado en su plantilla, produciéndose paradojas como que en días puntuales se refuerza personal del servicio excepto en el mencionado colectivo».
Por todo ello, ELA ha puesto en conocimiento de la Comisión de Personal estas quejas con el fin de que se inste a la dirección del Hospital y a Osasunbidea a tomarse en serio la salud de los trabajadores, solucione los problemas técnicos y realice un estudio detallado de los ratios, para actualizar la plantilla de celadores-as ante la creciente demanda de usuarios de dicho servicio.
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