Víctor Manuel Catalán Galindo (Tudela, 1987), graduado en Ingeniería en Diseño Mecánico, ha conseguido el I Premio al Mejor Trabajo Fin de Estudios en la Universidad Pública de Navarra (UPNA) relacionado con la discapacidad. Este galardón, dotado con una tableta electrónica, lo concede la Asociación Universidad y Discapacidad, integrada por profesorado y personal de administración y servicios de esta institución. El jurado del certamen ha premiado también con sendos accésits a Nerea Arana Baztán (Tafalla, 1982), que ha cursado el Máster en Intervención Social con Individuos, Familias y Grupos, y a Sandra Domínguez Burgués (Madrid, 1976), que ha finalizado el grado de Magisterio en Educación Primaria.
El acto de entrega de este premio ha tenido lugar hoy, viernes 2 de diciembre, víspera del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, en el campus de Arrosadia de la UPNA, con presencia, entre otras personas, de Eloísa Ramírez Vaquero, vicerrectora de Proyección Universitaria y Relaciones Institucionales; María Luz Sanz Escudero, presidenta del Comité de Entidades Representantes de Personas con Discapacidad de Navarra (CERMIN), y Carlos Alonso Vega, presidente de la entidad organizadora de los premios: la Asociación Universidad y Discapacidad, que busca apoyar la investigación y la docencia en discapacidad y poner en contacto a personas que puedan trasmitir su experiencia y apoyo a quienes lo necesiten.
UN DISPOSITIVO PARA AFECTADOS POR ICTUS
El fallo del jurado destaca del trabajo de fin de grado de Víctor Manuel Catalán “la originalidad de la propuesta y su potencial aplicabilidad”. En concreto, el ingeniero tudelano ha diseñado un dispositivo de uso autónomo para la recuperación de la mano en pacientes con daño cerebral adquirido, cuya principal causa es un accidente cerebrovascular (por ejemplo, ictus). El trabajo, dirigido por el profesor del Departamento de Proyectos e Ingeniería Rural José Ramón Alfaro López y desarrollado en el campus de la UPNA en Tudela, busca incentivar el movimiento de los dedos de la mano para lograr una rehabilitación duradera y personalizada.
“La mayor parte de los pacientes, tras un ictus leve o moderado, son capaces de recuperar la capacidad de andar con ayuda de dispositivos externos —explica Víctor Manuel Catalán—. Sin embargo, los movimientos del miembro superior solo los recuperan pacientes con una lesión leve y en un porcentaje muy bajo”.
Para lograr el movimiento de la mano, la máquina ideada por Víctor Manuel Catalán cuenta con “una serie de elementos diseñados y otra selección de componentes comerciales, todos ellos, debidamente unidos formando ensamblajes y mecanismos”. “El movimiento que efectúa el dispositivo consiste en una secuencia para levantar los dedos un determinado ángulo”, apunta.