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El cine Moncayo de Tudela vivió la noche de este lunes una de esas jornadas mágicas con las que el cine español sigue demostrando el idilio que mantiene con el público de la capital ribera. Una vez más Luis Alegre fue el maestro de ceremonias de una sesión en la que sobre el guión se iba a reconocer y homenajear a Antonio de la Torre, el actor español más nominado a los premios Goya, y que finalmente se vio sorprendido con la presencia de los directores de la película Jon Garaño, Aitor Arregi, José Mari Goenaga, un lujo del que pudo disfrutar el público que llenó la sala del cine tudelano.
El director de la XXVI Muestra de Cine Español de Tudela ensalzó la figura de De la Torre como la de un actor que es capaz de expresar de una manera especial y brillante. «Desde 2006 ha recibido 14 candidaturas y 2 premios Goya, casi una candidatura por cada uno de los trabajos que hace, un reconocimiento a un actor inmenso, con la capacidad de aportar verdad a sus personajes y un actor maravilloso».
Garaño, Arregi y Goenaga, encargados de dirigirle en «La trinchera infinita» compartieron con el público las sensaciones que tuvieron al trabajar con De la Torre, «un actor que tiene la magia de saber qué es lo esencial de una historia, prescindir de lo que no es verdadero y dejar solo lo auténtico, obsesionado con la verosimilitud y la realidad, que busca sorprenderte en cada toma y con la capacidad de sacar con un detalle o una mirada una verdad oculta. Todo eso lo convierte en un gran actor».
El homenajeado reconocía ante el público que recibía el modesto premio del festival con emoción. «Hoy he sido consciente de que tengo una carrera. Ha sido una jornada que me ha hecho detenerme en el tiempo y ver lo andado. Ha sido muy bonito. Gracias por este cine tan bonito, lleno de público y por este premio».
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