Este artículo lo escribo desde la preocupación por la actual situación, pero sin embargo con cierto optimismo, y con dos objetivos principales, el primero es aportar propuestas diferentes, novedosas, valientes y para TODA LA GENTE, no solo para una parte de la población, pero a la vez también asumibles, para cuando todo esto termine; y segundo, ordenar y volcar en un papel algunas de las ideas que me bullen en la cabeza estos días.
Para mi es muy decepcionante el papel de nuestros dirigentes, sobre todo de una oposición carroñera que no aporta soluciones concretas de ningún tipo, aprovechándose de esta situación desgraciada para sacar rédito; y aunque mucho menos, también me decepciona un gobierno del que esperaba bastante más, sobretodo de Podemos, que aunque sí están proponiendo medidas, pero siguen sin ofrecer soluciones valientes para TODOS/AS, en unas circunstancias extremas que bien lo merece
Lo más positivo con mucha diferencia está siendo el pueblo, su comportamiento, su solidaridad, su compromiso, su disciplina. Esto es lo mejor de todo indiscutiblemente, y esta inercia social no debemos dejarla pasar. Nos curaremos como pueblo de esta epidemia, pero seremos insensatos si no conseguimos enderezar la situación, ahora que somos más conscientes del poder del pueblo unido. Usando como armas la solidaridad y la movilización popular. Este “estado de alarma” debemos verlo como una oportunidad para no volver a la “normalidad” anterior. INTENTEMOS HACER UNA SOCIEDAD MAS JUSTA.
Estas son diversas propuestas para mejorar la vida de la mayoría y dar sentido a nuestras instituciones públicas como un servicio público:
1. Nuevo proceso constituyente para redactar una nueva Constitución más actual, más abierta a posibles reformas, sin monarquía ni inviolabilidades, más social y más justa (separación de poderes Real), y que blinde los servicios públicos y su financiación. Medidas que ampare la nueva constitución: revertir hospitales privatizados a públicos por ley; Instaurar una banca pública por ley.
2. El dinero negro acumulado durante años por evasores fiscales, que se amontona físicamente en paraísos fiscales, es una lacra a la que nadie pone solución. Este dinero negro lo ocultan sus dueños por toneladas en lugares secretos o en paraísos fiscales, impidiendo su inyección en la economía de los países para generar riqueza a la sociedad y a las arcas públicas (se calculan más de 70.000 millones ilegales de Euros solo en España). Existe una solución simple pero muy efectiva propuesta por Alberto Vázquez Figueroa en su libro “La ordalía del veneno”: Que la UE y el BCE anuncien un cambio de color de los billetes de 100 o más euros, por ejemplo los de 500 euros serán ahora verdes en lugar de morados. Habilitar un periodo de dos años para cambiarlos por los nuevos, tras lo cual los viejos billetes quedan anulados, serán solo papel mojado. Esta simple medida resultará demoledora para el dinero negro. Aplicando algo tan sencillo vendrá una inyección económica bestial en los países Europeos, equiparable a cuando se cambió la peseta por el Euro en 2002. Nadie quiere un dinero negro que no tenga ningún valor.
Una buena manera de combatir en adelante la acumulación de dinero negro sería anunciar públicamente que el cambio de color de los billetes se hará cada X años. De esta manera no sale a cuenta amasar dinero ilegal.
3. Otras medidas importantes, recuperar el dinero del rescate bancario (65.000 millones) por ley; la robotización de la industria debería pagar tantas cuotas a la Seguridad Social como trabajadores sustituya, o como puestos de trabajo destruya, por ley.
4. Renta Básica Universal para cada individuo, y eliminación del resto de prestaciones y subsidios condicionados. Existen suficientes estudios para saber que es posible sin grandes traumas para un país (Esta idea la defiende desde hace años el prestigioso economista Daniel Raventós). Esto combatirá frontalmente la precariedad laboral, y pagará mejor los trabajos que nadie quiere hacer.
Son ideas que considero fundamentales para cimentar las bases de un estado digno, un comienzo abierto a otras ideas interesantes que se vayan sumando.
Propongo cuando termine la cuarentena, que pasemos del confinamiento a la movilización para que todo no siga igual. Hacer valer y continuar, el gran trabajo hacia los demás que han hecho transportistas, cajeras/os, sanitarias/os, limpiadores/as, policías, autónomos, etc, para caminar hacia una sociedad mucho mejor.
Es momento de Dignidad, Igualdad y Justicia para TODOS/AS
Gustavo Gil Pérez Nievas