El Aspil-Jumpers Ribera Navarra FS ha caído derrotado por un doloroso 3-6 ante el FC Barcelona en un partido con dos caras totalmente opuestas. Una primera, con un Aspil valiente y enérgico que puso en aprietos a los culés, que también tuvieron sus ocasiones, y que concluyó 0-0; y una segunda, muy dura para los locales, que vieron como el Barcelona se ponía 0-2 a los 68 segundos de la reanudación. Estos tantos descosieron un choque en el que los culés se pusieron 0-6, pero en el que los riberos, que pese al marcador, las bajas y la paliza física, nunca dejaron de competir, pelearon para colocar el 3-6 final.
El inicio de partido dejó claras las intenciones de los culés, que salieron presionando muy arriba y causando problemas a los naranjas en la creación. No obstante, Paulinho, de tacón, fue el protagonista de la primera gran ocasión de un partido que continuó con un disparo de Ferrao al palo.
El Barcelona tenía más balón, pero el Aspil, con una rotación todavía más corta de la habitual por la expulsión de Javivi el sábado, salía con mucho peligro a la contra y generó varias ocasiones, pero el equipo volvió a estar falto de puntería.
En defensa, los riberos también sufrían las acometidas de los culés, que se ‘chocaban’ una y otra vez con Gus, extraordinario bajo palos y atento fuera del área, lo que provocó que al descanso se llegara con 0-0.
Un minuto fatídico en la reanudación
El buen sabor de boca de la primera mitad se esfumó en apenas un minuto de la segunda, lo que tardó el Barcelona en asestar dos durísimos golpes al Aspil. A los 31 segundos, Ferrao abrió la lata y, 37 después, Marcenio ampliaba la ventaja con el segundo, que descosió el partido.
Sin haber hecho nada mal, el Ribera se veía 0-2 y con el ánimo dolido. De ahí hasta el final, los 19 minutos restantes fueron un sufrimiento tan agónico como duro y estéril porque los culés continuaron apretando sin parar.
Gus pudo sostener a los riberos durante unos instantes, pero no pudo detener el disparo de Daniel, que definió muy bien tras un pase de Adolfo. Éste tanto, a 14 del final, obligó a ‘Pato’ a sacar a David de portero jugador, una estrategia con la que el Ribera volvió a funcionar muy bien, al igual que ante ElPozo, pero en la que, igual también que el sábado, la suerte le fue esquiva. En ataque, ya que Tripodi se topó con el palo y los naranjas no pudieron finalizar varias ocasiones por los malos controles; y en defensa, ya que un rebote propició el 0-4, de Joselito. Apenas 90 segundos después, Roger anotó el quinto aprovechando la presencia de David bajo palos y, a falta de 4 minutos, Adolfo anotó el sexto.
El partido estaba finiquitado, pero el Ribera, un equipo en el que el estilo y el esfuerzo son cosas innegociables, continuó jugando al ataque y logró una triple recompensa gracias a los tantos de Tripodi y Pazos (2). Tardía e insuficiente, pero seguro que válida para que los riberos, a pesar del 3-6, se marcharan con mejor sabor de boca a sus vestuarios y encaren con otra cara el choque del viernes, a las 21 horas, en Peñíscola.
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