El sector agroalimentario, y en concreto el de las verduras que tanto amamos, ha sido y es uno de los sectores económicos más importantes para Navarra, pero aún más para la zona de la ribera. Se considera un sector estratégico para nuestra Comunidad como una importante fuente de riqueza. Además nuestro estilo de vida nos lleva a consumir alimentos sanos y nutritivos, como las verduras, en formatos de cada vez más fácil preparación debido a nuestro poco tiempo disponible. Nuestras empresas del sector han sabido adaptarse, sin ninguna duda, a un mercado cambiante, han sabido innovar, han aumentado la variedad y presentación de sus productos y han puesto el ojo en la exportación como forma de crecimiento de este importante sector. Como todos los sectores económicos, el secreto es irse adaptando a un entorno cambiante en cada momento y el sector agrícola le ha sabido seguir para adaptarse a sus nuevos productos con sus cultivos, pero todo ello requiere infraestructura y en especial agua. Por ello, leo con agrado el triunfo de una Empresa de nuestra Comunidad, cuyo principal responsable conozco, en un sector tan importante para Navarra como el agroalimentario. Ha sabido innovar en tiempos a veces difíciles y ha conseguido su propósito, vaya mi enhorabuena por sus logros. Además me alegra doblemente que sea una empresa de mi querida ribera la que ha conseguido este éxito y me parece oportuno comentarlo aquí. Si recuerdan, hace un tiempo, hablaba del nexo de unión entre agua y desarrollo y la necesidad de adaptar las infraestructuras hídricas a los nuevos tiempos, no lo decía yo, lo dice la ONU. El agua, sin duda, es el eje central del desarrollo y en especial de un desarrollo sostenible, dado que es fundamental para los logros económicos. Sin embargo, todos sabemos que este recurso no es ilimitado pero si insustituible en nuestro bienestar y si su gestión se hace de forma eficiente y equitativa, se convierte en un factor clave para la economía. Por otra parte, la agricultura sigue siendo uno de los sectores con mayor consumo de agua en todo el mundo, más del setenta por ciento del agua que se extrae es para ella, aunque esta cifra varía según países y regiones. ¿Cómo queremos que sea la nuestra? Sabemos que la agricultura de secano de la que en ciertas zonas de Navarra sabemos mucho, es la predominante en ciertas zonas y que su productividad actual es menor que el potencial que podría tener con una buena dotación de agua. Si no bastase con esto, nos vienen nuevos retos como producir mayor cantidad de alimentos a medida que la población mundial crece. Por ello me hago eco de las palabras del empresario agroalimentario mencionado, que en una jornada sobre pymes reconocía que se abastecen de diversas zonas de España y Francia, pero que con la construcción de la primera fase del canal de Navarra han logrado aumentar la proporción de materia prima que compran aquí. ¿A que esperamos? ¿No es este tipo de oportunidades las que esperamos para el desarrollo de esta Comunidad? Nos queda aún mucho camino por recorrer y otras Comunidades próximas nos pueden hacer sombra para abastecer a nuestras propias empresas. Son muchas las preguntas que me rondan cuando pienso en ello, ¿es este el escenario que queremos? ¿o es simplemente el que nos merecemos por no continuar desarrollando infraestructuras que podrían cambiar las cosas?, ¿será el Gobierno capaz de dotar a la Ribera de las infraestructuras que merece y con agua a precios competitivos? ¿O nos ganaran la batalla otras Comunidades próximas? Por favor, póngase a trabajar hoy que las generaciones del mañana se lo merecen, dejémosles un buen legado. El agua y el desarrollo van de la mano, los empresarios de éxito lo constatan, ¿quién lo duda aún? Que lo diga ya.