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Alrededor de 500 personas salieron a la calle este 8 de marzo para sumarse a las actividades reivindicativas que se habían organizado en Tudela para celebrar el Día de la Mujer.
Las primeras en disparar el chupinazo de la jornada fueron las trabajadoras de las residencias de Tudela que dieron inicio a los actos organizados para esta jornada por la Plataforma 8M de Tudela. Una manifestación en la que participaron en torno a 500 personas recorrió las principales calles de la ciudad desde la Plaza Padre Lasa a la Plaza de los Fueros donde el colectivo feminista dio lectura a un manifiesto en el que se denunció el sistema económico «que provoca la mutilación de los servicios públicos, la precarización del empleo, el abandono de las personas más vulnerables, la emergencia climática, el aumento de las desigualdades, la violencia y esas manifestaciones fascistas que tan bien le viene al capitalismo para extender el miedo y la insolidaridad».
También recordaron que las consecuencias de la crisis «recaen en las espaldas de mujeres y de los y las trabajadoras precarizadas y racializadas que tanto incomodan», a las mujeres asesinadas por la violencia machista «mujeres que nos han arrebatado, Sara Pina entre ellas» y recordaron a las mujeres de Ucrania. «Desde el movimiento feminista de Tudela queremos mostrar !a indignación y asco que nos invade cuando la lógica de las bombas y las estrategias geopolíticas asesinas se imponen a la vida», señalaron.
Una vez finalizados los discursos, la mayoría de las y los participantes en el acto secundaron también la concentración convocada por el Ayuntamiento de Tudela a través del Consejo Municipal de la Mujer. En el acto la concejala de Servicios Sociales e Igualdad del ayuntamiento de Tudela dio lectura a la declaración institucional aprobada por unanimidad de todos los grupos representados en el consistorio tudelano. 
Asimismo, Agüera reiteró el compromiso del ayuntamiento en la promoción de políticas públicas que fomentan un cambio en el enfoque de los cuidados para avanzar hacia la igualdad entre hombres y mujeres, visibilizar y dar valor a los trabajos de cuidados que hacen posible la sostenibilidad de la vida, incidiendo en la transformación sobre los roles y estereotipos que refuerzan la división sexual del trabajo y reconocer las aportaciones y el trabajo del movimiento feminista en este ámbito. En este sentido, durante su intervención, la concejala de Izquierda Ezkerra, Inés Munuera, reclamó que las reivindicaciones del movimiento feminista en este día también tuvieran visibilidad y pudieran estar presentes en el quiosco, donde minutos antes del comienzo del acto tuvieron que retirar la pancarta que había encabezado sus actividades y recordó que» el quiosco es de todos y de todas», reclamó.
El acto concluyó con un aplauso unánime por todas las mujeres ucranianas «que no pueden manifestarse en este 8 de marzo», recordó la concejala Anichu Agüera.
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