Cuando éramos infantes, teníamos claro el significado de los adverbios de tiempo “antes y después”. Como teníamos claro el significado de los adverbios de lugar “arriba y abajo”. Como teníamos claro el significado de los adverbios, también de lugar, “delante y detrás”.
Los programas de infancia “Un globo, dos globos, tres globos” y “Barrio Sésamo” se encargaron de solucionar las posibles dudas espaciotemporales, a base de repetir los conceptos con ejemplos prácticos. Eran tiempos asimismo de escribir a mano y de realizar manualidades, dotando así al tacto y al cerebro de habilidades y conexiones necesarias para el desarrollo del pensamiento. No como ahora que todo se reduce a hacer continuos click para buscar la desinformación algorítmica que más imponen los poderosos, para así convertirnos en gregarios individuos de serie.
Hoy, debe de ser por causa de la IA (Inteligencia Artificial) que está acabando con la IN (Inteligencia Natural), no tenemos las cosas tan claras. De hecho, en política confundimos a los de arriba con los de abajo, sobre todo en tiempos de elecciones, en que los de arriba recorren los mercados junto a los de abajo para hacernos creer que somos iguales. Y en las rotondas nunca se sabe si el perseguido va delante y el perseguidor detrás. Tal vez por eso proliferan las rotondas.
Y, si con el tema de las elecciones, en general, confundimos el arriba con el abajo, en las recientes pasadas y en las que están por venir a la vuelta de la esquina no acabamos de ver cuáles son antes y cuáles después, ya que lo municipal, lo autonómico y lo nacional parece ser lo mismo, aunque nos digan que son cosas diferentes.
Así que, para anular el peligroso pensamiento crítico, arrojamos a nuestros infantes, a edades cada vez más tempranas, contra los insulsos programas televisivos y les regalamos móviles “inteligentes” para hacerlos más ignorantes, anulándoles no sólo la capacidad de pensar, sino hasta la capacidad de saber en qué mundo viven.
Por favor, Epi, Blas, Espinete, Coco, Don Pimpón, rana Gustavo y Triqui monstruo de las galletas, regresad y explicadnos de nuevo lo de arriba y abajo, lo de delante y detrás, y lo de antes y después, amén de tantas otras cosas. Tras los fracasos escolares, cada vez más manifiestos, hay países que ya están intentando prohibir la IA para rescatar la IN. A buen seguro que, si rescatamos ese reciente “antes”, tendremos un mejor “después”.