Carmen, Mario y María fueron los encargados de dar a conocer el trabajo de investigación
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Mario Ruiz, Carmen Aguirre y María Compés, alumnos del 2º de bachillerato del Instituto «Valle del Ebro», han sido los protagonistas de una de las jornadas divulgativas sobre las excavaciones de la iglesia de San Nicolás que ha organizado el ayuntamiento de Tudela a través de su concejalía de Centros Cívicos.

Los tres estudiantes, que forman parte del proyecto de Bachillerato de Investigación I+ que desarrolla el instituto Valle del Ebro, pudieron explicar a los asistentes las conclusiones a las que ha llegado su investigación sobre los enterramientos decúbito prono (boca abajo) que han aparecido en las últimas campañas de talleres de arqueología y que ha dirigido el arqueólogo tudelano Juanjo Bienes en el antiguo templo.

La investigación

El proyecto, relatan, empezó gracias al empuje del profesor de geografía e historia, Pablo Ijalba, que compartió con los alumnos de anatomía y la asignatura de geografía e historia de Navarra la noticia de la aparición de los misteriosos enterramientos.

Para llevar adelante su investigación los alumnos han contado con el apoyo de profesores pero también han participado de manera directa en las excavaciones arqueológicas. «Fue una experiencia muy buena. La anatomía es algo que nos gusta mucho a Carmen y a mí y para nosotros ha sido increíble vivir en primera persona la excavación, manipular los huesos, limpiarlos y pensar que eran personas que habían vivido en Tudela hace cientos de años. Ha sido impresionante», confiesa Mario Ruiz.

La labor de documentación ha corrido a cargo de los estudiantes de geografía e historia que han acudido al Archivo Diocesano, han contactado con museos y localizado a expertos en este tipo de enterramientos. Han buceado entre documentos y, sobre todo, testamentos, explica María Compés. «Ha resultado curioso descubrir la forma en la que escribían y que muchas veces nos ha resultado difícil de entender».

Una de las curiosidades del trabajo ha sido encontrar a una investigadora sueca especializada en este tipo de enterramientos por todo el mundo. «La pena ha sido no poder contactar con ella, aunque lo hemos intentado. Pero hemos aprendido que a lo largo de toda su carrera ha documentado unos 600 enterramientos de este tipo por todo el mundo. Por ello llama la atención que en San Nicolás hayan aparecido 6 enterramientos, una proporción muy grande en un sitio pequeño como Tudela», resalta Carmen Aguirre.

Conclusiones

Después de tres meses de trabajo, que coincidieron con el tercer trimestre del curso pasado, han podido realizar sus propias conclusiones sobre este tipo de enterramientos. «No hay nada claro sobre el hecho que motivo que fueran enterrados de este modo ya que los archivos no nos han dado ninguna respuesta concreta y los huesos tampoco nos han aclarado nada sobre las circunstancias de las muertes, así que las razones podían ser muchas; que el difunto quiso enterrarse así como penitencia; que lo pidieron las familias; o que se trataba de gente adinerada que quiso ser enterrada así como gesto de humildad».

Aunque no han podido determinar una teoría exacta, los alumnos dan por aprovechado el tiempo que han dedicado al proyecto. «Hemos aprendido a buscar la información en fuentes más profundas. Si buscas a fondo, contactas con personas y contrastas puntos de vista descubres cosas que de notro modo no hubiéramos sabido y que te permiten profundizar más en la investigación», concluye Maria Compés.

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