Alejo. Foto ©AinhoaLaucirica
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Alejo Huerta (Tudela, 1992) abre una nueva etapa en su trayectoria musical con Alejo, toda una declaración de intenciones de un proyecto en el que el joven tudelano toma las riendas con un proyecto personal del que ha dejado testimonio en un disco que acaba de ver la luz y que ha titulado «La fiesta era para otros» y que es, como le gusta defender, la fotografía del momento actual que vive como artista.

La nueva etapa de Alejo llega por evolución. Confiesa que emprender en solitario era algo que estaba en su mente pero, como en muchas ocasiones, son las circunstancias y el empujón que llega de fuera es el que termina de decidir el paso. «Me llegó la propuesta en un momento en el que creí que era lo que debía de hacer y me lancé. Es algo nuevo para mí, que me apetecía y que me ayuda a que todo gire en torno a mis ideas y mi cabeza», reconoce.

Con X the banjo Alejo realizó un recorrido satisfactorio, en el que llegó a cotas inesperadas y con lo que adquirió una experiencia que siempre formará parte  de su faceta como músico. Pese a todo, asegura, ahora ha sido como empezar de nuevo. «No es partir de cero, pero toca volver a empujar, promocionar, generar público… pero tengo ganas y llega en un momento muy bonito a nivel personal, en el que estoy componiendo mucho y con vista a grabar nuevos temas. Estoy muy ilusionado con este punto de partida», indica. «No es un mundo fácil, pero creo que he llegado a un momento en mi vida que  la música es la cosa que menos mal hago. Forma una parte muy importante de mi vida y que algo sea difícil o complejo no tiene porque echarme atrás para no intentarlo. El precio de la fama consiste en que para que una persona sea reconocida muchas tienen que ser desconocidas, es la premisa del mundo en el que estoy y la acepto con deportividad. Estoy para hacer música, buenas canciones y por tocar. Si mi foco fuese la fama estaría haciendo algo mal», se sincera.

En «La fiesta era parta otros» nos encontramos con un Alejo sincero, en el que escribe desde dentro, con temas en los que es fácil encontrarse con la esencia del propio artista. «Quienes me conocen van a escuchar al Alejo que vive el día a día con un montón de intensidad. El que se preocupa por su mundo interno y que trata de entenderlo. Es por eso por lo que escribo canciones. Para mí es una forma bastante terapéutica de encontrarme, dar pasos adelante y ser cada día un poco mejor», explica

Sus temas están llenos de sinceridad con textos muy cuidados. Siempre ha querido compartir historias en sus canciones y lo sigue haciendo con una mayor base musical y literaria que demuestran la inquietud que invade el espíritu creativo que atesora. «Una canción siempre es algo complicado», señala. «En el mundo que estamos ahora creo que la gente no está preparada para pararse a escuchar una canción de 8 y 10 minutos con 15 estrofas y sin apenas estribillo como ocurría en los 60 y que es una forma de canción que a mí me encanta. Ahora plasmar tus sentimiento en apenas cuatro minutos es mucho más complicado».

Quizás, por ello, comparte historias en las que prefiere dejar la puerta abierta para que el oyente pueda sentirse identificado, que pueda interpretaras y hacerla suyas. «Una música abierta y universal es lo que me da como músico ese punto de conexión con nuestro público y conseguir que mis sentimientos se focalicen en muchas personas a las que no conozco», defiende.

En el peculiar caminar en solitario en el que se ha embarcado, Alejo está más arropado que nunca con firma de management, distribuidora digital y la firma editorial con Universal, tres pies de apoyo que se completan con la banda y los perfiles sociales imprescindibles en la música actual. «La verdad es que para ser una carrera en solitario estamos bastante gente. No me siento solo, es todo lo contrario, aunque sí es cierto que todo gira en torno a tu imagen», confiesa.

Tras el lanzamiento del disco sus desvelos no van más allá de disfrutar de lo que le gusta, la música, componer, tocar… «Siempre intento tener pocas expectativas y vivir al día. El mundo de la música es una vaca bastante flaca, hay gente muy buena haciendo cosas increíbles y no tengo por qué ser el siguiente. Solo espero que la gente me escuche, disfrute con las canciones y que sienta lo que he intentado expresar. El lanzamiento del disco marca una nueva etapa en la que espero que la gente conecte con mi música y vea todo el esfuerzo y trabajo que hemos dejado detrás».

Gira

Para dejarse descubrir el 14 de mayo Alejo presentará su disco en la sala Cadavra (Antiguo Costelo), una de las salas míticas de la capital de España y el 24 de junio tocará cerca de casa, en el Mugacu Fest de Viana compartiendo cartel con Xoel López y Sidonie, al que seguirán nuevas fechas.

Su propuesta llegará en un formato eléctrico de banda, que cuyo directo replica al disco, y otro formato en acústico que aportará el punto íntimo con el el artista crea sus temas. «El directo es la excusa por la que hago los discos. El directo lo es todo. Para mí la música es muy importante cuando está viva y creo que en el mundo en el que me muevo lo importante es tocar, ensayar, la diversión viene componiendo, grabando y sobre todo cuando estás encima de un escenario que es cuando realmente conectas de verdad con el público. Quiero tocar todo lo que se pueda y más. Para mí es muy importante y creo que es uno de mis puntos fuertes», concluye.

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