Desde el 31 de diciembre de 2011 la contrata del Servicio de transporte urbano de Tudela estaba caducada y, en las dos últimas legislaturas, ni Casado ni Larrarte hicieron nada por solucionarlo. El actual Ayuntamiento lo tenía muy fácil. Posibilidad de importante subvención y necesidad imperiosa de cambio de vehículos y de dar a la ciudadanía el servicio que se merece.
Una vez que este Ayuntamiento se puso manos a la obra, el asunto que más llama la atención es, que después de 21 años de este servicio en funcionamiento, no se haya llevado a cabo, previo a su remodelación, un riguroso estudio de mercado. La empresa CAF Turnkey & Engineering ha sido la encargada de redactar los pliegos que regulan la concesión del nuevo servicio y “una encuesta ciudadana del servicio actual”, no un estudio de mercado y, por cierto, nos ha costado 19.000€ (iva excluido).
Desde 2002 existen las tres tristes líneas circulares: roja, amarilla y verde. Estas se mantienen con la nueva contratación, con novedades, algunos cambios a peor y otras condiciones que se quedan como están desde su origen. El cambio más importante es el de los nuevos vehículos (tres de ellos eléctricos y uno híbrido). En cuanto a las líneas, se ha añadido una nueva, la azul, para conectar el centro con polígonos de ocio y trabajo, una línea experimental o un experimento, ya veremos en qué queda.
Otro asunto llamativo es que, entre los objetivos del nuevo servicio, no aparece el de disuadir del uso de vehículo privado ni que sea un transporte que la ciudadanía use o pueda usar “para todo”.
Analizo a continuación varios aspectos del nuevo servicio que ha entrado en funcionamiento el 3 de abril, para lo que me apoyo en lo que consta en el pliego de condiciones de dicho servicio.
Marquesinas. Se va a continuar con la presencia de solamente algunas completas, en muchas paradas ausencia de las mismas y, en otras, con falta de elementos. En cualquier caso, insuficientes y, aunque se vayan a colocar 6 nuevas, no van a cubrir las necesidades.
¿Para todo y para todos/as? Aunque se hayan ampliado horarios, frecuencias y servicios en domingos y festivos, el servicio se sigue quedando corto. No está pensado para el acceso al ocio y la cultura. Por poner algunos ejemplos, no se puede ir y volver del cine en bus, ni del Teatro Gaztambide, ni de una conferencia en un centro cívico, ni de cenar un sábado del centro de Tudela…
Servicio nocturno sábados: nada de recorridos ni horarios nocturnos de las líneas habituales. Los horarios de la línea amarilla acaban a las 22.00, los de la roja a las 21.30 y los de la verde a las 20.00. Poder volver a casa los sábados con un servicio nocturno, un tema muy importante para tudelanos y tudelanas, especialmente para los más jóvenes, no se ha tocado ni ha interesado. En el caso de estos últimos, las familias ya pagan los taxis de la chavalería o les buscan ellos con su vehículo. Lo que sí que hay son horarios más tardíos en la línea azul, la de los centros de ocio y trabajo, donde se establecen servicios adicionales entre las 22.50 y las 23.40. ¿Por qué no horarios adicionales en alguna de las otras líneas o alguna línea nocturna especial?
Las reclamadas líneas radiales para acceder a distintas zonas o barrios de forma directa no se han diseñado. En una ciudad tan pequeña como esta no se puede llegar a casi ningún destino sin una gran vuelta perimetral, lo que implica emplear mucho tiempo y, por lo tanto, no animar en absoluto a usar el servicio.
Paradas. Han cambiado algunos recorridos de las líneas circulares y ha ocasionado que Capuchinos, la parada más céntrica de la ciudad, muy próxima a cuatro supermercados y a múltiples y variados comercios, servicios, hostelería, etc., una parada desde la que la ciudadanía podía acceder a sus barrios, ya no existe para ninguna de las líneas. En la línea verde, la que recorre gran parte de la ciudad, la parada más cercana al centro neurálgico de Tudela es la del final del Paseo Invierno (esquina con San Marcial): casi nada. También de esta línea verde se elimina la parada de Avda. del Barrio situada enfrente de un supermercado.
Es sorprendente que se diseñe una nueva línea azul para acceder a centros comerciales y con horarios más amplios y que, paradójicamente, se elimine la parada en la zona más comercial de la ciudad y otra frente a un supermercado. Dicho sea de paso: ¿este Ayuntamiento apoya al comercio tudelano de cercanía?
Lo mismo ocurre en el Barrio de Lourdes con la parada de la calle Ador: ya no hay parada en esa calle central y estratégica del citado barrio y, sin ella, prácticamente todas las paradas se sitúan en sus extrarradios. La parada más céntrica, si así se le puede llamar, sería la de la Calle Aguas del Alhama.
Vehículos. Se puede decir que hay un cambio de vehículos que ya era un imperativo, puesto que vulneraban derechos de quienes los usan y del medio ambiente. Habrá tres eléctricos y uno híbrido.
Líneas. Mantienen su diseño de ser circulares y no se añade ni una sola línea radial que acorte recorridos. Verde: continúa con la misma frecuencia todos los días, cada media hora y con servicio al mediodía. Funciona de 8.00 a 21.00 laborables y sábados; domingos y festivos de 10,00 a 20.00. Hasta ahora no había servicio los mediodías ni los domingos y festivos. Roja: laborables cada media hora hasta las 16.00. A partir de esa hora la frecuencia es de sesenta minutos. Funciona de 7.30 a 22.08 laborables; sábados, domingos y festivos presta servicio cada hora con parón de dos horas al mediodía, desde las 7,30 a las 22.00. Han empeorado las frecuencias de las tardes laborables, domingos y festivos. Amarilla: laborables cada 30 minutos hasta el mediodía; cada 60 por la tarde. No funciona entre las 14.00 y las 15.38 hrs. Sábados, domingos y festivos la frecuencia es de 60 minutos, para dos horas al mediodía, funciona entre las 8.00 y las 22.00.
Anteriormente la frecuencia era la misma, comenzaba más tarde, acababa al mediodía y no había ni sábados ni festivos. La nueva línea azul: tiene horarios y frecuencias difícil de resumir en estas líneas. Tiene 4 rutas diferentes: una a polígonos industriales y tres a polígonos comerciales y de ocio que sí incluyen servicios adicionales los viernes y vísperas de festivos hasta las 23.40, lo que no ocurre con ninguna de las otras líneas.
En definitiva, gracias a este Ayuntamiento, tenemos un nuevo servicio contratado para 10 años más, con nuevos vehículos, por fin, pero básicamente con las mismas líneas circulares que hace 21 años y dando un servicio muy precario, que no satisface a todos/as los usuarios ni posibles nuevos clientes.
Este sí que era un proyecto fácil de bordar y, el actual Ayuntamiento de Navarra Suma, ha perdido la oportunidad de hacerlo, conformándose con encargar un proyecto a una empresa e implicándose poco o nada en concretar lo que necesita la ciudad y la ciudadanía, con ninguna visión de futuro y con muy poco apoyo a la movilidad sostenible, puesto que sigue siendo un servicio que no disuade del uso del vehículo privado, ni tan siquiera, por ejemplo, a los trabajadores/as del hospital a donde llegan dos de las cuatro líneas: peor… imposible.
Para finalizar y, para colmo, resaltar que hay una parada en el Barrio de Lourdes que lleva el nombre de una calle que se cambió en la anterior legislatura municipal en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica.
Una gran decepción.
ANA J. JACOSTE SÁEZ