[ihc-hide-content ihc_mb_type=»show» ihc_mb_who=»4,5,6,7,8,9″ ihc_mb_template=»2″ ]
El departamento de Medio Ambiente ha culminado la redacción del plan de emergencia de Buñuel ante inundaciones, un proyecto que se ha desarrollado a través de la sociedad pública Gestión Ambiental de Navarra-Nafarroako Ingurumen Kudeaketa (GAN-NIK), en colaboración con el Ayuntamiento de la localidad.
Con este plan finaliza la redacción de los 17 planes para los municipios afectados por alguno de los tramos de riesgo ARPSI (Áreas de Riesgo Potencial Significativo de Inundación) definidos por la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) en el tramo medio del Ebro.
Plan de Emergencia de Buñuel
El tramo definido en Buñuel tiene una longitud de 15 km, y afecta también a las localidades de Fustiñana, Cortes y Novillas (Aragón).
Con el se pretende minimizar el impacto de las diversas avenidas que han afectado a este tramo del río Ebro y que provocaron daños de importancia en la localidad y que incluso algunas de las calles del casco urbano se inundaran durante las crecidas de los años 2003, 2015 y 2021.
El casco urbano y gran parte de las zonas de cultivo, situadas entre éste y el cauce del río, se trataron de proteger de las inundaciones del río Ebro mediante una red de motas que tratan de contener los desbordamientos del río en su margen derecho. Este sistema de motas se acompaña de una serie de tajaderas, cierres automáticos de clapetas, y sistemas de bombeo, que deben ponerse en funcionamiento con la debida antelación para minimizar los desbordamientos del río que se originan aguas arriba de Buñuel, en el término municipal de la vecina localidad de Ribaforada.
Niveles de emergencia
El Plan de Emergencia de Buñuel tiene previstas y protocoliza estas acciones, así como el corte de los accesos a las motas, el corte de la carretera NA-5211, y especialmente los avisos a los vecinos con viviendas en zonas en riesgo de resultar anegadas.
En el caso del Plan de Emergencia de Buñuel, gracias a los datos suministrados en tiempo real por los aforos de la CHE, y a los nuevos umbrales de caudal definidos en el plan, el ayuntamiento cuenta con una organización y forma de actuar consistente frente a las inundaciones.
El plan se estructura en un primer nivel de pre-emergencia que sirve para que los responsables municipales inicien un seguimiento continuado de la evolución de los caudales aguas arriba, en las estaciones de aforo de Castejón y Tudela. A partir de ahí, y en función de la evolución de los caudales en el Ebro, se activarán sucesivamente los niveles 0, 1, 2 y 3 de emergencia del nuevo plan local de gestión de la emergencia. Los niveles 2 y 3 indican ya la posibilidad de que se produzcan daños graves en la localidad.
Cada uno de los grupos operativos en los que se organiza el plan (Dirección del Plan, Policía Municipal y Brigada Municipal) tiene prevista cada una de las acciones que deben llevar a cabo al activarse los sucesivos niveles de emergencia.
Anticiparse entre 4 y 6 horas
Los datos de los caudales circulantes por la estación de aforo de Tudela van a permitir a las y los responsables municipales de Buñuel contar con una anticipación de entre 4 y 6 horas para llevar a cabo las acciones previstas en su plan. Este margen de actuación se incrementa hasta las 8-14 horas gracias a la observación de los caudales suministrados por el aforo de la CHE en Castejón. Hay que destacar que el objetivo del plan es que sea una medida de adaptación que está dirigida a intentar minimizar los daños que van a provocar las avenidas importantes, adelantando la preparación a la inundación para disminuir los daños de la misma.
Visita al entorno del río Ebro
La consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, Itziar Gómez, acompañada por el director gerente de GAN-NIK, Luis Sanz, se ha reunido hoy con la alcaldesa de Buñuel, Mayte Espinosa, y personal técnico del ayuntamiento para dar a conocer el plan como medida de adaptación de los ayuntamientos al cambio climático.
La consejera Gómez ha destacado el trabajo desarrollado en el marco del proyecto LIFE Nadapta, y el conocimiento que aporta sobre los posibles efectos que el cambio climático puede tener en Navarra en áreas como el agua. “Gracias a estas acciones –ha indicado la consejera-, la Comunidad Foral Navarra continúa avanzando en abordar una problemática tan importante como es la gestión ante las inundaciones y en concreto, en mejorar y adelantar las medidas que se adoptan para su gestión y prevención”.
Gómez ha resaltado también que “con Buñuel finaliza la redacción de los planes para los municipios en riesgo potencial de inundación en el marco del proyecto LIFE-NAdapta, pero se seguirá trabajando en ellos y en sus actualizaciones. Estos planes son esenciales porque permiten al Gobierno de Navarra y a los ayuntamientos estar preparados de la manera más eficaz posible y ser ágiles en situaciones de emergencia”.
Promoción de planes de autoprotección
Este plan de autoprotección se deriva de las medidas del LIFE-IP- NADAPTA-CC en el que Gobierno de Navarra y GAN-NIK participan en la acción ‘Promoción de planes de autoprotección frente a inundaciones de las entidades locales’ con los que se contribuye a la Hoja de ruta de cambio climático, KLINA, y a su medida de adaptación que busca mejorar la resiliencia de la población a las consecuencias de los eventos climáticos extremos.
Entre las medidas destacan el apoyo a las entidades locales en la elaboración, implementación y/o actualización de sus planes de actuación municipal ante el riesgo de inundaciones (PAMRI), fomentando la sensibilización y la participación pública.
En la mayor parte de los planes redactados se ha incluido también la contratación e instalación (financiada por el proyecto LIFE NADAPTA) de una herramienta informática para el ayuntamiento (aplicación de escritorio y app móvil) que facilita la gestión de la alerta temprana y la operatividad del plan municipal, así como los avisos a la población.
17 planes municipales finalizados
Entre los años 2018 a 2022 GAN-NIK ha desarrollado, en colaboración con 17 municipios con tramos ARPSI la redacción de sus planes, como actuación piloto recogida en el LIFE NADAPTA para promover la autoprotección ante el riesgo de inundación y de adaptación al cambio climático, ya que se prevé que estos fenómenos extremos van a ser más frecuentes cada vez. Estella-Lizarra, Caparroso, Falces, Funes, Tudela, Arguedas, Lodosa, Lesaka, Etxalar, Bera, Cortes, Azagra, Otsagabia / Ochagavía, Leitza, Arruazu y Tafalla ya tienen su plan operativo gracias al proyecto LIFE NADAPTA. A todos estos municipios se suma ahora el último redactado para Buñuel.
El presupuesto para la redacción de los 17 planes y su difusión a la población en el proyecto LIFE ha sido de 200.000 euros y se han contratado 15 herramientas informáticas para ayuntamientos por un importe de 109.000 euros
[/ihc-hide-content]
