Las medidas anti incendios presentadas por Gobierno de Navarra en el Consejo Navarro de Medio Ambiente llegan tarde y son insuficientes. Aunque recogen algunas de las propuestas que las organizaciones ecologistas venimos demandando desde hace muchos años, llegan tras producirse una oleada de incendios, la mayoría evitables. Las Organizaciones medioambientales abajo firmantes reclaman la adopción de manera firme y obligatoria de medidas de prevención de incendios más ambiciosas.
Los daños que nos han dejado los 30 incendios ocurridos durante la ola de calor son sumamente cuantiosos: pérdida de masa forestal y monte bajo, herramienta fundamental para mitigar los efectos del cambio climático; pérdida de flora y fauna salvaje amenazada; grave afección al suelo, lo que incrementa los procesos de desertización; daños cuantiosos en empresas, con el posible cierre de alguna dejando en el paro a cientos de personas; daños en viviendas y destrucción total de alguna de ellas, y pérdida de cosechas. Por fortuna, no ha habido que lamentar víctimas humanas. Según las primeras conclusiones 5 incendios estarían provocados por rayos, 2 por las chispas de un tren, 3 pendientes de investigación con sospecha de “actividad humana” y los 20 restantes, el 67%, por las chispas de cosechadoras. Dos de los incendios más extensos y dañinos económicamente han tenido un origen en cosechadoras: Valdizarbe – El Perdón y entorno de Bardenas.
Tras el grave incendio de 2021 en la Reserva Natural “Vedado de Eguaras”, Gobierno de Navarra ha dejado pasar un año sin aportar medidas hasta ahora. Si se hubieran tenido en cuenta las que venimos proponiendo, muchos de estos incendios no se hubieran producido. Ya que han demostrado su nula capacidad en cuanto a la prevención de la mayoría de los incendios forestales producidos recientemente en Navarra, es necesario el cese o dimisión de la Consejera de Desarrollo Rural y Medio Ambiente, del Director General de Medio Ambiente y del Director General de Agricultura.