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Diego Carasusán acaba de publicar «Karasu», una novela que recoge el pequeño proyecto personal en el que periodista tudelano se embarca tras la historia de su apellido. Desde siempre, reconoce, me había intrigado su origen… «es extraño, especial, y ciertamente somos pocos los Carasusán en Navarra. Esto siempre me provocó cierto interés por saber de dónde venía y que significaba».
Entre noticia y noticia, entrevistas y otros proyectos se embarcó en una pequeña investigación sin ambiciones. Libros, internet, similitudes léxicas, y pistas que le conducían por el mundo, España, Turquía e incluso China detrás de un apellido. «En la investigación hay dos piezas fundamentales, el río Karasu y el escudo heráldico del apellido, una media luna, que dan pie a localizar la investigación. También doy por hecho que el sufijo San significa hijo de. Tres ideas que me sirven para tirar del hilo y unir el resto de piezas que me he ido encontrando desperdigadas tanto geográficamente como etimológicamente».
El autor se juntó con demasiadas piezas sueltas y sin un caja para guardarlas, así que se planteó escribir esta pequeña historia a modo de archivo hasta que el tiempo le permita embarcarse en un proyecto de investigación más extenso o alguien quiera recoger su testigo y animarse a completar un relato que aún deja hilos sueltos, asegura.
En el libro una cuadrilla de amigos, entre los que se encuentra el propio autor, ponen todas las piezas de la investigación sobre la mesa. El relato se hilvana a través de unos pergaminos en los que se narra la historia de un misterioso niño, dado por muerto al nacer y que, tras permanecer escondido, buscará la venganza de aquellos que le dieron por muerto. Esta historia de ficción servirá de epicentro al relato que va a descubrir el lector y en el que se intercalan los datos históricos y reales que Carasusán ha ido recopilando en su investigación.
El encuentro geográfico con el río Karasu en Turquía encauzó bastante la investigación y el periodista y escritor lo agradece reivindicando el protagonismo que hidrológicamente le correspondía y que el Eúfrates robó al río de las aguas negras.
«Karasu» no iba a ser más que una novela de consumo interno, para la familia, parientes, o conocidos, como confiesa en el propio libro autor, pero las primeras críticas le animaron a embarcarse en algo más ambicioso. «Creo que es una historia que trata temas que son universales y, sobre todo, que me sirve como cauce para contar un poco como soy yo, cómo me he ido formando en estos 45 años y cómo mi personalidad ha ido cambiando. No nací muerto, pero sí era de una forma y, gracias a todas las personas que me he ido encontrando en la vida, compañeros, amigos, te formas una personalidad. El lector seguramente se vea identificado en la historia que yo les cuento porque es la misma que les ocurre a ellos. Con las mismas decepciones y alegrías, y la experiencia de que todo se puede aprender y salir más fuerte», comenta Carasusán
Quienes quieran descubrir el misterioso origen del apellido pueden encontrar la obra en las librerías Arco Iris y Letras a la Taza de Tudela. Si se desvela es algo que deberán decidir tras adentrarse en las 138 páginas del relato.
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