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Inverduras, más allá de la promoción, por Alejandro Toquero

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Más allá de los objetivos turísticos y de promoción de la programación elaborada por el Ayuntamiento de Tudela, Inverduras está concebido para poner al sector de la agroalimentación de Tudela y la Ribera en el lugar que le corresponde.

De nada sirve la promoción de la verdura ribera si la administración no cuenta de forma práctica y realista con este sector. El sector agroalimentario lo está pasando realmente mal. La promoción de nuestra verdura es solo un pequeño impulso para paliar el ahogo que sufren con “el bestial” aumento de costos. Después de haber dado lo mejor de si mismos durante el año largo de pandemia, el mercado y las políticas fiscales no les están agradeciendo el esfuerzo.

Fueron capaces de aumentar su capacidad productiva y logística. Abastecieron la disparada demanda de los supermercados. Fueron la resistencia en una sociedad que pudo verse inmersa en un caos sin precedentes. Un ejemplo de resiliencia. Cualquier político con dos dedos de frente tendría que ponerse de su lado y a su disposición.

La agroindustria es la segunda actividad económica por peso en el Producto Interior Bruto foral. Emplea en Navarra a más de 16.000 personas. El grueso del sector está aquí, en la Ribera. No debemos dejar que la crítica coyuntura en la que se encuentran les ponga más contra las cuerdas por falta de voluntad y acción política.

El sector agroalimentario debería ser el nexo que nos hiciera actuar y reivindicar. Algo tendremos que decir ante el aumento del precio de los fertilizantes, del gasóleo, del plástico, del agua o de las semillas. Algo. Como administraciones a su servicio, nuestra responsabilidad es presionar a los gobiernos superiores, para que se implementen estímulos fiscales y no se deje caer al campo y a la industria que lo rodea y complementa. De ello depende nuestro futuro. Porque somos una zona asentada sobre los pilares de la agroalimentación. Y por el trato recibido, muchas veces no lo parece.

Necesitamos un frente común para conseguir hacer atractiva la Ribera. Para que la educación atraiga nuevo talento, jóvenes formados en puestos técnicos y especializados. De nada sirven los parches. Si no preparamos el relevo, se acabó.
Está pendiente el Canal de Navarra, no se actúa en el ámbito educativo universitario ribero, no se dota a la cabeza tractora de este entramado, Tudela, de la financiación necesaria para poder tirar del carro del progreso.

No creo que haya mayor lastre para cualquier sector y economía que la incertidumbre. Hace falta trabajo para que el futuro no sea un agujero negro sin respuestas. Hacen falta incentivos para el emprendimiento en el sector, fomento del empleo juvenil y de la formación profesional y universitaria. Hace falta voluntad de reconocimiento al papel que la agroalimentación juega en nuestra economía, en nuestra cultura, en la supervivencia de la esencia tudelana y ribera, y en el sostenimiento de todo lo que somos.

Vienen tiempos difíciles. Lo sabemos. Y se necesitan incentivos. La Ribera no puede dejar de ser la potencia agroalimentaria que es. Porque eso significaría enterrar el trabajo de nuestros padres y abuelos en esta tierra, en los desvelos de cada uno de los empresarios que están instalados aquí, en cada trance de malas cosechas, inundaciones, sequías o plagas. En todas esas historias que nos han traído hasta aquí y han hecho de Tudela y la Ribera lo que es hoy en día.

Alejandro Toquero
Alcalde de Tudela y Presidente del Consorcio EDER