Desde nuestra entidad acusamos al Equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Tudela de estar instalado en la desidia en este caso. Desde el comienzo del actual curso llevamos solicitándole la adopción de medidas para mejorar la seguridad del alumnado sin que hasta ahora se haya hecho nada. Denunciamos que vamos a acabar el curso igual que lo empezamos.
Resulta totalmente indignante comprobar como se está incumpliendo lo aprobado ya en Pleno en 2019. Como se recordará, el Pleno del Ayuntamiento de Tudela aprobó entonces la creación de entornos escolares seguros. Es muy preocupante que nuestras Instituciones no cumplan lo acordado.
Son muchas las comunicaciones que desde Ecologistas en Acción hemos mantenido con el Concejal de Urbanismo, con el Técnico de Urbanismo, con el Área de Educación, con la Concejala de Medio Ambiente o con Jefatura de Policía Municipal. Hasta hemos tratado de comunicarnos con el Alcalde, sin que éste ni siquiera nos haya contestado.
En concreto desde nuestra asociación se están solicitando medidas en la calle Gayarre, que da acceso al CP Elvira España y al Colegio Compañía de María, y en la calle que da acceso al CP Monte San Julián y la Escuela Infantil Santa Ana. En estas zonas los problemas de seguridad vial son diarios:
Coches aparcados a las puertas de ambos centros. Coches que hacen maniobras indebidas, dando la vuelta en la propia calle. Esta maniobra implica mucho riesgo al ir marcha atrás. Coches que hacen maniobras y meten el morro en la acera, arremetiendo contra el alumnado. Coches que estacionan en la calle impidiendo que los otros conductores vean al alumnado que sale entre los vehículos para cruzar la calle. Coches circulando a una velocidad inapropiada y no adaptada a la situación de la vía. Colapso circulatorio y elevado nivel de contaminación por NOx, PM10, PM2,5 o bencenos.
Podemos entender las dificultades de la calle Gayarre, ya que es una zona con vecinos y el Centro de Salud Gayarre. Pero el colapso circulatorio solamente es generado por los padres y madres que acceden a esta calle para dejar o recoger al alumnado. Nuestra propuesta se centra en la colocación de una señal de prohibido el acceso a dicha calle en dos franjas horarias, de 8:30 a 9:30 y 13:30 a 14:30, con la salvedad para vecinos y usuarios del Centro de Salud. En esta calle resulta muy preocupante comprobar como prácticamente todo el tráfico es generado por el centro concertado y afecta al público, ya que prácticamente su alumnado accede al centro andando. Sería interesante recapacitar sobre los distritos escolares, sabiendo que a este centro concertado acude alumnado de otras zonas de Tudela e incluso de otras localidades. Desde nuestra entidad respetamos el derecho de elección de centro pero criticamos el modo en el que se accede al mismo, en coche hasta la misma puerta.
Como decimos, podemos entender ciertos problemas en la calle Gayarre, pero no comprendemos por qué no se actúa en la calle que da acceso al CP Monte San Julián y la Escuela Infantil Santa Ana. Ya que esta calle no comunica a viviendas y la única circulación que hay la generan los propios padres y madres del alumnado. Por eso decimos que el Equipo de Gobierno está instalado en la desidia, ya que en esta calle sería muy sencillo adoptar esos cierres por franjas horarias tanto a la entrada como a la salida.
No es problema de dinero, porque recientemente el Ayuntamiento se ha dotado de 10000 euros para esta cuestión. El problema es que no hay voluntad. En este sentido, parece ser que el precio de la voluntad es mucho mayor que el de dos simples señales regulando el tráfico motorizado en esas calles.
Por todos estos motivos volvemos a pedir al Equipo de Gobierno que actúe, que solucione los problemas de seguridad vial y que cumpla lo aprobado en Pleno. Estamos obligados a mejorar la seguridad, a fomentar la movilidad activa y la independencia del alumnado. Tener unas calles totalmente colapsadas por los coches va totalmente en contra de todo esto.