Anais Belío es miembro del grupo de danzas de Buñuel y profesora de su sección txiki. Reconoce que la suspensión de las fiestas se ha vivido con mucha pena en el colectivo. “Para nosotros el día de la Virgen es muy importante. Desde la mañana estamos dedicándole nuestros bailes y la tarde, con el paloteado es un momento de mucha emoción, así que todo esto nos ha dado mucha pena”, reconoce. “En Buñuel se ha hecho un gran esfuerzo por recuperar el Paloteado habíamos conseguido poner en marcha un grupo de txikis que se estrenaron el año pasado y que este año no han podido mostrar los bailes tan bonitos que habíamos preparado con ellos”, lamenta.