Alejandro Amenábar abordó la eutanasia con Mar Adentro, y ahora la guerra civil, reflejando el enfrentamiento entre Miguel de Unamuno, y el general Millán-Astray el 12 de Octubre (curiosa fecha) de 1936 en el Paraninfo de la Universidad de Salamanca. Amenábar mezcla datos históricos y material de ficción, centrándose en la famosa frase: “Venceréis pero no convenceréis”, de Unamuno (frase que probablemente nunca dijo, no usó micrófono, por tanto no pudo ser grabada como otras intervenciones), para dar la visión del escritor frente al conflicto. Los actores son: Karra Elejalde, Eduard Fernández, Santi Prego.
Verano de 1936, el escritor y filósofo Miguel de Unamuno (Karra Elejalde) apoya la rebelión militar que persigue poner orden ante la situación creada por la República. Inmediatamente, el gobierno de la República lo destituye como rector de la Universidad de Salamanca. Al mismo tiempo, el general Franco (Santi Prego), junto al general Millan-Astray (Eduard Fernández), crean un único mando para derrotar al ejército republicano.
Unamuno, hombre contradictorio, honesto, creyente a su modo, en un principio apoyó La República, y luego la rebelión militar, pero pronto observará su error. Unamuno vivirá su pesadilla, al ver como sus amigos son detenidos y ajusticiados. Acudirá al palacio de Franco para interceder por un amigo, pero éste hará oídos sordos, y el general Millán-Astray, le instará a participar en el día de la raza, produciéndose el episodio en la Universidad.
Amenábar se detiene poco en el conflicto, (alguna escena muestra los muertos en las cunetas), y se centra en la personalidad de Unamuno, crítico con todos los regímenes políticos por sus crueldades y falta de rigor intelectual. Junto a esto, refleja las relaciones familiares del escritor con sus hijas, y las relaciones con sus amigos (excelente la escena en el altozano, al discutir con su amigo socialista, mostrando el carácter cainita de las dos Españas). Sin embargo, los innecesarios flashback relativos a su mujer y la lenta presentación de personajes ralentizan la narración. Además, le falta un punto de osadía y crítica con un conflicto que trajo terribles consecuencias.
A nivel interpretativo destacan: un excelente Karra Elejalde mostrando la personalidad compleja del escritor, y Eduard Fernández encarnando al colérico, odiador del intelecto Astray. Junto a ellos, Santi Prego resulta veraz como Franco.
El director de Los Otros, retrata el pensamiento de un intelectual contradictorio, pero crítico con las atrocidades de su tiempo y las que ocuparon su lugar; en el contexto de la guerra civil, cuyas heridas todavía no se han cerrado.