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Esta media noche comenzará una nueva campaña electoral que determinará quién estará al frente del ayuntamiento de Tudela los próximos cuatro años. Una jornada en la que el actual alcalde, Eneko Larrarte cierra un capítulo en su etapa al frente del ayuntamiento de Tudela y que el resultado del próximo 26 de mayo determinara si tiene continuidad.
¿Cómo valora la acción de gobierno de estos últimos 4 años?
Creo que ha sido positiva. Nos costó coger el ritmo por dos cosas. La falta de experiencia y por lo que cuesta engranar a tres partidos diferentes; y porqué no nos encontramos un Ayuntamiento falto de financiación y de proyectos que poner en marcha. También entiendo que es normal. Después de 20 años acometer un cambio como el que hemos planteado cuesta.
También creo que nos costó entender cómo funciona la administración. Una vez hemos tenido proyectos se ha notado la actividad, las juntas de gobierno ahora son mucho más profusas de lo que eran al comienzo de la legislatura, por eso creo que la valoración que hay que hacer es positiva.
¿Qué ha supuesto gobernar?
Ha supuesto darte cuenta de todo lo que hay detrás para sacar adelante las propuestas. Poner más el foco en los ingresos que en los gastos. Entender el porqué de la lentitud de la Administración. Que no representas a un partido político, que representas a una ciudad. Yo creo que hemos sido capaces de hacerlo.
¿De qué se siente más orgulloso de estos cuatro años?
Ahora salimos fuera y la gente nos dice que Tudela cuenta y tiene algo que decir. En el día a día parece que es algo menor. Pero cuando vamos a Pamplona o vamos a otros sitios la gente te transmite que algo ha cambiado. Que Tudela tiene voz, que la Ribera parece que ha renacido. Tenemos este orgullo, bien entendido, de lo que es Tudela como capital de la Ribera. Hemos dado el giro de pasar de cierto victimismo a reivindicar lo que es nuestro y hacerlo defendiendo proyectos y propuestas concretas.
¿Estar en el Gobierno les ha hecho perder el contacto con la ciudadanía del que siempre han presumido como valor?
Más que perder contacto o perspectiva, el ejercicio de gobierno nos ha hecho perder frescura y que en algún momento nos hayamos enmarañado en exceso dentro del despacho por tratar de sacar adelante las cosas o querer imprimirle más ritmo a la administración. Eso sí nos ha pasado. Pero no creo que eso haya implicado perder perspectiva o el contacto con la ciudadanía.
Al margen de quien gobierne la ciudad a partir del 26 de mayo, la legislatura va a comenzar con muchos proyectos en marcha. ¿Lamenta no haber podido llevarlos a cabo dentro de estos 4 años de su gobierno?
Yo soy bastante autoexigente y me fastidia no haber sido capaces de llevar a cabo más cuestiones de las que ahora están arrancando. Pero si hacemos balance, cuando entramos solo nos encontramos que había que hacer la obra del Queiles, y que había qué hacer porque sí por el riesgo que suponía el estado del cubrimiento y sin más financiación que los recursos propios del Ayuntamiento. Ahora el próximo ayuntamiento se va a encontrar que hay entre cinco y siete proyectos en marcha, todos muy importantes, por un montante de más de 10 millones de euros y que ya tienen su financiación.
Eso es lo que debería esperar cualquiera. Que quien le antecede le deja el trabajo como herencia. A mí me fastidia no haber podido acelerar más los ritmos, pero visto con perspectiva creo que es un bagaje muy importante. Dejamos unas piscinas que Tudela necesitaba hace no sé cuántos años, unos campos de fútbol con una financiación del prácticamente el cien por cien. Otra batería de calles en el barrio de Lourdes, las calles Juan Antonio Fernández, Eza y Capuchinos, el Paseo Pamplona, San Nicolás o el nuevo parque del Queiles.
En la anterior campaña su grupo hizo bandera de la sanidad, ¿se ha avanzado?
Algunos han querido hacer con este tema bastante ruido, pero se ha avanzado mucho. Hay un proyecto que reforma las urgencias y el centro de salud Santa Ana con un proyecto aprobado y para el que existe financiación dentro del presupuesto de los Presupuestos Generales de Navarra. Existe un plan operativo para la nueva manzana sanitaria de Gayarre, que habrá que dotar presupuestariamente pero que marca una hoja de ruta. Existe un equipo de resonancia que ya está en el hospital. Se ha puesto en marcha el bloque quirúrgico. Creo que es un escenario muy diferente a cuando se nos decía que desaparecían los laboratorios o el autobús de la vida no era financiado. Me parece que es que no hay color en cuanto a sanidad.
Las contratas han sido otro de los que no se ha dejado de hablar en la legislatura.
De aquellos 14 o 15 pliegos caducados vamos a tener a terminar la legislatura teniendo adjudicados más de 10 y el resto lanzados excepto uno, que será el de alumbrado público.
¿Y la limpieza?
Creo que se ha tratado de dar una imagen que no se corresponde con la realidad. Tudela no está más o menos limpio que lo que pueda estar Zaragoza o lo que pueda estar Pamplona u otros municipios. Independientemente de que ello, espero que Tudela esté más limpio a través del civismo, mejorando el control de la contrata y con el aumento presupuestario que hemos puesto.
Una de sus señas de identidad eran las políticas sociales ¿creen que han quedado diluidas entre otros proyectos?
Las políticas sociales son una gota que va solventando problemas a la gente. Lo que hemos hecho ha sido herramientas que respondan a las necesidades, cosa que antes no pasaba del todo. Hemos ajustado plazos de atención y hemos aumentado plantilla para responder a los perfiles de los demandantes y eso ha tenido también un reflejo en la incorporación al empleo con un trabajo muy callado.
Y eso se ha notado y las cifras cantan. Se ha reducido la brecha territorial, ha habido un crecimiento del empleo, un empleo que todavía no es de calidad y que es bastante precario, pero su creación ha sido superior en Tudela y La Ribera respecto de la media de Navarra.
Un dato que nos solía llamar mucho la atención era la media de ingresos por familia o por hogar de la Ribera respecto a la media de Navarr. Pues bien, en estos cuatro años se ha reducido la distancia en 1.000 euros, lo cual es casi un 25 por ciento de la distancia que había en 2014. Hemos ido recortando, independientemente de que nos queda bastante camino por recorrer.
¿Dónde ha quedado la participación ciudadana?¿La participación de la ciudadanía en los procesos de primaria de su formación?
Ahora estamos en otro momento, un momento en el que la gente lo que nos pide es tener la opción de gobernar y gobernar bien. No decimos que las primarias estén mal, las respetamos, pero nos parece que como alternativa a la derecha para liderar y alcanzar la alcaldía de Tudela, lo que necesitamos trabajar desde el primer día y para ello es no solo son necesarias personas buenas y con capacidad, sino que haya un buen equipo. Nosotros hemos primado el equipo frente a las primarias.
¿Cómo es la Tudela que deja?
Ahora hay un proyecto, y entre quien entre, el proyecto está avanzado, incluso si es alguien con ideas diferentes a las nuestras. Lo que se ejecutará será aquello que nosotros hemos puesto encima de la mesa. Por lo tanto yo creo que el rumbo está marcado. Lo que ocurre es que creo que nosotros somos los más capacitados para empujar.
Pero hay actividades en las que Tudela ha perdido esa referencia que ejercia en la comarca, como ocurre a nivel comercial
El comercio ha cambiado. Nosotros tenemos que hacer un esfuerzo junto con el comercio local para mantener o recuperar parte de esa inercia comarcal pero Amazon es un fenómeno global. Y es un fenómeno global y si vas a Zaragoza vemos que está ocurriendo lo mismo. El comercio local también está cerrando frente a las grandes superficies o la compra online.
¿Se ha avanzado todo lo que se planteaba para la revitalización del Casco Viejo?
Teníamos que haber avanzado también más. Se ha intervenido en la peatonalización, está habiendo inversión privada, se promueve un hotel, hay alguna inversión en vivienda, se ha relanzado el proyecto de horno Coscolín Cosco que llevaba más de 20 años parado.
Es verdad que no hemos rematado cosas todavía como San Nicolás y tenemos que ser capaces de contar con un proyecto ilusionante para la Plaza Vieja y que estas zonas empiecen a estar como está Herrerías o como está Mercadal.
¿Qué balance hace a nivel industrial?¿Ha conseguido Tudela atraer empresas?
Las dinámicas que tenemos hablan en positivo. El grado de ocupación que tiene la ciudad agroalimentaria va subiendo así como el número de licencias de actividad que se están dando en la ciudad. Creo que son datos positivos.
En un ámbito donde la competencia el global, un ayuntamiento lo que tiene que hacer es ofertar buenos servicios para que las empresas que puedan mostrar interés por instalarse no se nos escapen. Aquí es importante que se nos ubique en el panorama nacional, que tengamos imagen de marca, cosas que veces parecen tonterías pero creo que no lo son. No es lo mismo tener un vídeo promocional que no tenerlo y no es lo mismo estar en determinados foros de decisión que no estar, porque son cosas que abren puertas.
También creo que en la medida en que seamos capaces de que la estrategia comarcal vaya cogiendo inercia será más factible que se desarrolle más actividad económica. Lo que hemos hecho ha sido sembrar.
En el tema industrial hay otra pata importante que no depende solo de nosotros. Ver si somos capaces de instalar algo más de industria auxiliar del sector del automóvil. Por la ubicación que tenemos, junto a Volkswagen en Pamplona, General Motors en Zaragoza y Mercedez Benz en Vitorio, somos un lugar idóneo para la misma.
¿Tendrá Tudela Carta de Capitalidad? Se le ha criticado porque su formación votó en contra de esta pooibilidad cuando la planteó el Partido Socialista.
Hasta ahora sólo existía una Carta de Capitalidad, la de Pamplona, y creo que Tudela tiene que tener un estatus diferenciado para el ejercer de cabecera de comarca y de segunda ciudad de Navarra.
¿Por qué no ha habido confluencia con otras formaciones de izquierda en Tudela?
Porque no pensamos todos lo mismo. Entendemos que en el panorama actual la pluralidad es una virtud. Es cierto que por la ley electoral puede generar algunos problemas, pero también creo que esa pluralidad es positiva.
El Partido Socialista tiene muchísimos años de trayectoria y no va a renunciar a sus siglas. En el caso de Podemos reo que también tiene su espacio. En el caso de Izquierda-Ezkerra creo que ha demostrado en esta legislatura que ha sido capaz de demostrar que puede gobernar y que además puede gobernar para mucha más gente que sus votantes. Entre todos podemos sumar para continuar teniendo un gobierno del cambio.
¿Cómo resumiría la relación y trato que ha existido con el Gobierno de Navarra?
Yo creo que ha sido buena, con momentos de crítica, como cuando ha habido acciones en el ámbito de educación que no nos gustaban. Ha habido ejemplos de rapidez y velocidad de diálogo con determinadas consejerías que, según me decían, no era lo habitual en legislaturas anteriores.
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