Desde nuestra Asociación sin ánimo de lucro, la PROTECTORA DE ANIMALES RIBERA NAVARRA, y aprovechando la reciente noticia de la aprobación de la nueva »ley de protección animal» en Navarra, queremos transmitirles nuestro caso más reciente, porque queremos que la gente lo sepa. Que la ley es necesaria ya lo sabemos todos.
Se trata de una perra mestiza de Sabueso que alguien intentó matar de un disparo en la cara. El cartucho era de caza menor, propio para la caza de aves pequeñas, así que no la mató, pero si la condenó de por vida, quedando los restos del perdigón por toda su cara, afectando a nervios, ojo, y oreja.
Una persona de gran corazón la encontró y la llevó sin dudarlo al veterinario. Todo ocurrió un sábado por la tarde, momento en el que no hay ningún servicio de recogida de animales en Tudela, así que hay que improvisar y buscarse la vida. Por supuesto no tenía microchip identifcativo.
Nos pidió ayuda porque ella no podía quedársela, y no pudimos negarnos. Al principio pensamos que había sido atropellada, le faltaba una oreja y tenía un gran agujero en la cabeza.
Rápidamente se le administraron los medicamentos necesarios y se quedó ingresada en la clínica veterinaria que colabora con nuestra protectora.
La analítica nos confirmaba anemia severa por falta de alimento, ya que estaba tan delgada que no sabíamos cómo estaba viva todavía. Un animal que debería pesar, por su altura y porte, unos 25-30 kg, pesaba solo 18kg.
Su mandíbula no podía abrirse debido a un problema ya viejo, que pesamos que ha sido la causa por la cual, quien sea, intentó asesinarla sin éxito.
Pero tras hacerle varias radiografías, pudimos ver la realidad. Un perdigón había dejado su metralla en el lado derecho de la cara de Olivia.
El caso ha sido llevado ante las autoridades, para que se tenga constancia de que nos rodean asesinos, que además no pierden dinero en una bala, sino que disparan con lo más barato que hay.
Olivia está recuperándose, pero su pronóstico todavía es reservado.
Queremos mostrar nuestro enfado y rabia por casos como este, porque mientras alguien quiso matarla, nosotras estamos haciendo todo lo posible por salvarla. Porque quien no se gastó en su vida ni un mísero euro en ella siendo de su propiedad, no va a pagar por lo que ha hecho. Si algún día le sirvió como compañera y ayudante de »trabajo», para él se convirtió en basura.
Ya hemos invertido en ella 800€, y lo que todavía queda por delante… Menos mal que nos está ayudando gente genial con sus donaciones económicas, si no sería imposible.