Un año más Aceites Sandúa está presente en las Jornadas de Exaltación y Fiestas de las Verduras que se celebran durante estos días en Tudela y en las que la empresa lleva participando desde sus inicios.
“No podemos faltar a unas jornadas en las que se ensalza algo tan identificativo de la Ribera y de Navarra como las verduras” asegura Laúra Sandúa, gerente de Aceites Sandúa. “Las verduras no se entienden sin un buen aceite de oliva virgen extra y de esto también sabemos mucho en el sur de Navarra” prosigue Sandúa.
Sin embargo, en esta edición, el aceite de oliva de Sandúa se ha abierto a nuevos maridajes con un Taller de Chocolate al Aroma de Sandúa o una Degustación de Espárragos con Mermelada de aceite de oliva.
“Este año, nuestra intención es dar a conocer la versatilidad del aceite de oliva y para ello hemos impulsado un taller que marida el chocolate con nuestro aceite de oliva virgen extra de Navarra, Capricho Navarro. Un aceite de cosecha propia y de recolección temprana, para conseguir su punto álgido de sabor. Un producto con una calidad excepcional”.
El taller, impartido por una repostera de la capital ribera, tiene como objetivo dar a conocer cómo elaborar postres con chocolate y aceite de oliva.
“Es sorprendente lo bien que casan estos dos alimentos en su forma más pura y natural” afirma la gerente de Aceites Sandúa. Algo que también se puede aplicar a la Degustación de Espárragos con Mermelada de aceite de oliva, que tuvo lugar también en Tudela, en el marco de las Jornadas de Exaltación y Fiestas de las Verduras.
“Un producto 100% navarro como el espárrago, pero acompañado de una sabrosísima y diferente mermelada que tiene como ingrediente principal el aceite de oliva. Algo digno de probar para experimentar nuevos sabores, sin duda” continúa Laura Sandúa.
Tanto la mermelada como la fusión de chocolate con aceite de oliva se pueden consultar en la web de www.aceitesandua.com
Para una empresa que lleva desde 1975 en el sector de los aceites vegetales la innovación para adaptarse a los cambios en las tendencias de consumo y de comercialización, es una constante.
La renovación y ampliación de instalaciones y la apertura al mercado exterior, con una veintena de países de todo el mundo a los que servir, son algunos de los ejemplos de los cambios experimentados por Sandúa en los últimos quince años. A los que se suman otros más recientes como la producción de aceite de oliva virgen extra a partir de sus propios olivares, la renovación de sus envases pet o la incorporación de una línea cosmética con aceite de oliva ecológico.
Lo que no ha cambiado es la calidad a la hora de elaborar sus aceites. Algo que define a la empresa desde sus inicios. Sandúa ha sido pionera en no incorporar nunca grasa de palma, ni derivados en sus aceites especiales para freir. Tampoco otros potencialmente alérgenos como soja o cacahuete. “Estamos convencidos de que es la calidad lo que al final aprecia el cliente, a lo que añadimos un servicio de atención y asesoramiento que es muy solicitado y nos distingue”, recalca Laura Sandúa.
