La comunidad educativa del Colegio de La Anunciata de Tudela se ha reunido en el patio para recibir a la Cruz de Lampedusa como motivo de los actos de celebración de la Semana de la Paz y de los Derechos Humanos.
Amaia Labarga, responsable de pastoral en el centro educativo ha relatado la historia de esta cruz, bendecida por el Papa Francisco el 9 de abril de 2014. «Fue construida con tablas de una barca con inmigrantes que naufragagó el año 2103 y en la que murieron ahogados 349 inmigrantes. Hoy se ha convertido en símbolo universal de la dignidad y necesaria acogida a los migrantes y refugiados. Una cruz hecha a petición del Papa Francisco con la madera de las barcas que han llevado y llevan todavía, a mucha gente a la búsqueda de un futuro mejor y que para muchos fueron también su ataúd».
En el acto, los alumnos han cantado canciones, leído poemas y la frase «El corazón no tiene fronteras» en 13 de los idiomas presentes en el colegio tudelano: rumano, nigeriano, búlgaro, quetzua, árabe, moldavo, portugués, Nantene, ruso, chino, francés, inglés, euskera y castellano.
A continuación los alumnos de 3º y 4º de E.S.O. acompañados por sus «hermanos pequeños» de 2º, 3º y 4º de primaria, han recorrido en procesión las calles de la ciudad hasta la Plaza Nueva donde se ha dado lectura un manifiesto por la Paz y acompañar la Cruz de Lampedusa hasta la iglesia de los padres Jesuitas.