Aunque parece que lo peor de la crisis económica que hemos sufrido ha pasado, el comercio y la empresa riberos siguen luchando por la recuperación. La pequeña y mediana empresa, más vulnerable a la inestabilidad económica, se afianza poco a poco gracias al esfuerzo y el trabajo constante. El comercio tradicional y a la pyme suponen una parte esencial para que nuestras localidades se mantengan vivas y la sociedad cohesionada, generando riqueza y puestos de trabajo.
Si nos fijamos en los datos de empleo de septiembre en Navarra, podemos ver que, al contrario de lo que ocurrió en el conjunto de España, (y a lo que suele ocurrir en septiembre) el paro descendió en Navarra, tanto con respecto a agosto como a septiembre del 2016. La cifra total de parados se sitúa en Navarra en 35.295 personas, 656 menos que en agosto y 3.987 menos que hace un año.
El número de contratos aumentó en septiembre. Se realizaron 7.359 contratos más que en agosto, aumentaron en todos los sectores y en mayor medida en los servicios y la industria. De todas formas, hay que seguir trabajando por consolidar esta recuperación de las cifras de empleo, que no hay que olvidar, están lejos todavía de los valores previos a la crisis económica, hace ya diez años.
Por otra parte, con los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) en la mano, se puede decir que los principales datos del mercado laboral en Navarra mejoraron en el segundo trimestre de 2017 con respecto al mismo periodo del año anterior.
La subida de precios se mantiene estable en Navarra
En cuanto a la variación anual del Índice de Precios al Consumo correspondiente al mes de septiembre, los precios aumentaron en Navarra un 1,1% con respecto a septiembre de 2016. Los precios siguen creciendo por tanto a tasas anuales moderadas, que nada tienen que ver con el decrecimiento de los precios que tuvo lugar hasta mediados del año pasado.
No obstante, los precios tampoco despuntan y se mantienen en tasas más cercanas al 1% que al 2% y cuando varían, lo hacen como resultado de las partidas más volátiles o estacionales.
Este crecimiento moderado de los precios viene a su vez acompañado de un crecimiento del consumo de las familias superior al 3% desde el año 2015, lo que da a entender que si bien la demanda (el consumo interno) está creciendo de manera sostenida desde hace tiempo, no se está trasladando a los precios; quizá porque las empresas buscan mantener o aumentar sus ventas y cuotas de mercado a través de la contención en los precios.