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El concejal no adscrito del ayuntamiento de Tudela, Ignacio Martínez Santos, ha planteado al pleno municipal una moción solicitando la suspensión de la ejecutividad del cambio de denominación de las 49 calles del Barrio de Lourdes.
En su intervención, Martínez, ha recordado que un grupo de vecinos y vecinas amparándose en la Ley Foral 27/2002, han iniciado una recogida de firmas para solicitar la convocatoria de una consulta popular que, desde el pasado día 22 de agosto, cuenta con un periodo de tres meses para conseguir el 10% de las firmas de los tudelanos y tudelanas, para solicitar la convocatoria. «Este hecho relevante a mi juicio, intenta hacer posible la participación ciudadana y el pluralismo inherentes a un Estado democrático, y creo que es conveniente la suspensión de la ejecutividad del cambio de denominación de ¡as 49 calles del Barrio Lourdes», ha indicado el edil.
Todos los grupos que conforman el equipo de gobierno han rechazado con contundencia la propuesta llevada al debate por Ignacio Martínez Santos. El portavoz de Tudela Puede, Daniel López, ni siquiera ha querido valorar la iniciativa, mientras que el socialista, José Ángel Andrés ha explicado que su grupo «no puede apoyar una propuesta que propone suspender un acuerdo de pleno que nos parece bien por razones de legalidad, políticas y éticas; un acuerdo que quiere recordar, reconocer y reparar a los asesinados en el golpe militar y la represalia franquista, no solo por legalidad, sino por clara convicción», ha señalado reiterando que el rechazo «es congruente con nuestros sentimientos y consistente con nuestra conducta».
También contraria a la propuesta se ha mostrado la portavoz de Izquierda-Ezkerra, Marisa Marqués, que ha reiterado a apuesta ética y legal de su formación por el cambio de nombre de las calles. «En Izquierda Ezkerra apostamos por escuchar a la ciudadanía en favor de una democracia sana, pero entendemos que no tiene sentido una consulta sobre el cumplimiento de una ley» y ha recordado que aunque el ordenamiento jurídico reconoce el derecho de la ciudadanía de promover una consulta la propia ley expresa que no pueden someterse a consulta aquellas cuestiones contrarias al ordenamiento jurídico y aquellos que menoscaban las facultades de los órganos representativos de los municipios.
Al rechazo del equipo de gobierno se ha sumado el concejal de la CUP, Gustavo Gil Pérez-Nievas, que ha rechazado la iniciativa de Martínez Santos y que llamó la atención al acusar al equipo de gobierno de no querer escuchar a los vecinos. «Se ha hecho un largo e importante debate, ha habido tres asambleas, además de la del propio compañero Ignacio, y un periodo de propuestas que finalizó el 22 de junio para recibir sugerencias de nombres de calles. Participación la ha habido y se ha intentado hacer. Afirmar lo contrario es incierto», ha recordado Gil que, además, ha advertido que el resultado de la consulta «no sería vinculante y todos los indicios nos conducirían a un incumplimiento de la ley».
A favor de la propuesta se han posicionado los concejales del PP, José Suárez e Irene Royo. Suárez ha considerado la propuesta de Martínez Santos como «el resultado de no escuchar la voz de los vecinos afectados o no haber sabido escucharlos de forma activa». El edil ha defendido la petición de la consulta y la no ejecución del aucerdo del pasado 20 de julio para cambiar las calles del Barrio de Lourdes, «una petición que a todas luces pone de manifiesto el fracaso sin precedentes de esta corporación».
También favorable a la propuesta ha sido el grupo municipal de UPN. Su portavoz, Natalia Castro, que ha considerado que la recogida de firmas que se ha iniciado para solicitar la consulta «no provoca daño ni perjuicio por unos meses». La edil regionalista ha señalado que con esta iniciativa «se abre un escenario nuevo y no existe ningún informe jurídico que indique que sea contraria a la ley».
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