¡Hacer volar la imaginación! Este es el lema de las Jornadas de Diseño de la Escuela de Arte y Superior de Corella, que cumplen ya su novena edición. “Queremos que los jóvenes dejen salir toda la creatividad que tienen dentro” asegura su directora Maite Saénz, “porque, cuando haces algo con todas las ganas, sobre todo en el mundo de las artes gráficas, puedes dar salida a esa vocación hasta el final y cumplir tus sueños de trabajar en este sector”.
Uno de los aspectos que se ha tratado en estas jornadas y donde se exige creatividad y capacidad de innovar es, en el llamado ecodiseño y diseño industrial unido a él, “algo que aquí todavía es algo desconocido, pero en algunos aspectos, vamos incluso por delante de Europa. Por eso es una oportunidad poder trabajarlo, porque además, tiene muchas posibilidades laborales. Por eso, además de al diseño general y hacer un guiño a las artes escénicas más clásicas, hemos querido dedicar una jornada matinal a la reflexión sobre el ecodiseño”.
Las charlas se imparten por la tarde para que pueda asistir el público en general que esté interesado. Pero siempre hay unas jornadas por la mañana que el centro oferta a todos los estudiantes que rompen la rutina habitual y que se estructura en talleres orientados a las artes plásticas y escénicas: “Ha habido desde transfer, títeres, danza urbana, fotografía, de impresión 3D, algunos de ellos impartidos por profesionales del centro y otros con la colaboración de profesionales de la zona, como Escuela de Danza Ángel Martínez, Colectivo Humo, Consorcio Eder, Ecoembes, Innedit Innovación, B/S/H Electrodomésticos… Se han creado unas sinergias y un foto de reflexión muy interesantes”, explica Maite Sáenz.
El trabajo de organizar estas jornadas es enorme, pero que estén ya en su novena edición habla de su éxito: “creemos que es una oportunidad poder escuchar a todos estos profesionales y aprender de ellos”.
Hacer rentable el diseño
“Somos diseñadores, pero también somos empresarios”. Así de contundente se muestra Kike Valdenebro, uno de los ponentes de las charlas de estas IX Jornadas, y que junto a su socio Javier Domingo, está al frente de Muskae, un estudio madrileño de diseño y desarrollo de identidad corporativa y comunicación para empresas del segmento premium y lujo.
“Nuestra intención ha sido dar pinceladas sobre lo que los estudiantes se van a encontrar ahí fuera. Tu trabajo de diseñador se limita en el mejor de los casos a un 30-40%, el resto del tiempo lo pasas hablando con otras empresas y tomando decisiones de negocio, tanto para el tuyo como para el de tu cliente. Hay que hacer de director de orquesta de equipos multidisciplinares, cada uno de ellos aporta una parte muy rica, pero hay que coordinarlos desde el punto de vista del negocio. Vamos a hablar un poco de todo, de diseño, de estética, pero sobre todo, de cómo convertir en rentable todo lo que aprendes en una escuela como esta, como todo esto se convierte en un producto vendible”.
Y es, para Valdenebro, se ha llegado a un punto en el que las técnicas de producción permiten a casi todas las marcas ofrecer un nivel de calidad muy similar: “hay poca diferenciación entre comprar un producto y otro. Por eso, la antigua técnica de márketing que era potenciar la calidad del producto, ya no sirve. Una marca busca ahora representar un modo de vida, una actitud. Tú no compras un ordenador y otro porque te parezca, mejor, o un perfume o unos vaqueros… Si no que lo compras porque te identificas con esa marca, representa una serie de valores que encajan contigo. El ejemplo más claro es Apple, que ha conseguido una legión de fieles que compran sus productos sin compararlos con otros, solo porque son Apple. Hoy en día una marca es el conjunto de experiencias que un usuario tiene a lo lago de su vida con u producto o una empresa. Por eso trabajar en este mundo, ya no basta con ser solo diseñador gráfico”.