Los responsables de la Comunidad de Bardenas, el Ejército español, la OTAN, demasiados
cargos políticos, los curas del Monasterio de la Oliva, algún biólogo y por supuesto Rajoy y Trump nos mienten compulsiva y continuamente al respecto del polígono de tiro de Bardenas. Recordar el significado del verbo mentir, expresión o manifestación contraria a lo que se sabe, se piensa o se siente, también cosa que no es verdad.
Pues bien, no es verdad que sólo se realicen una vez al año ejercicios con fuego real en Bardenas, como aseguraron los responsables de Defensa a los y las parlamentarias forales que acudieron a las instalaciones del polígono el pasado mes de enero. No ha pasado ni un mes entre los últimos ejercicios con fuego real, y el siguiente que se anuncia entre los días 22 al 28 de febrero y los tres primeros días de marzo. Estas “misiones”se encuadran en el contexto de otras paralelas, que se desarrollarán en el desierto de Nevada por los Eurofighter del ALA 11 (Sevilla) y el ALA 14 (Albacete), y el objetivo es “mejorar el adiestramiento avanzado de las unidades de combate y apoyo al combate” a través de misiones en “escenarios complejos, de alta amenaza y simulando un ambiente real”, muy tranquilizador el mensaje que nos hace llegar el Mando Aéreo de Combate (MACOM). Y todo esto, ocurre en plena época de nidificación.
Nos miente la OTAN cuando niegan que sus aviones usen munición de uranio empobrecido en Irak o Siria, tal y como ha admitido esta semana el Pentágono. Nos oculta información el Ejército español cuando no explica en sus informaciones qué tipo de munición van a usar sus escuadrones y los del ejército de EE.UU en las maniobras Red Flag, según ellos, uno de los ejercicios más exigentes del mundo.
Nos mintió Gayarre y otros, cuando al final del anterior convenio con el Estado, en el año 2000, aparentaba una posición de firmeza contra el polígono de tiro, que resolvió a cambio de 3,6 millones de €. Nos mintió el Ministerio de Defensa en 2008 y la Junta de Bardenas, a cambio de una nuda propiedad de las tierras de Bardenas, que puede considerarse contrario a derecho, ya que el Estado no era propietario de estas tierras. También hubo en esta ocasión un aumento del canon, dinero manchado de sangre, por si hay alguien que a estas alturas de la vida aun tiene dudas. Aquí se entrenan para matar y practicar las guerras más crueles de nuestra actualidad. En este polígono de tiro los ejércitos de la OTAN realizan las prácticas de la barbarie que más tarde imponen a millones de personas en otros lugares como Kosovo, Irak, Libia, Afganistán, Siria, Yemen…
Aquí y ahora, estamos cediendo nuestras tierras para que se practique la guerra a cambio de unos presupuestos municipales más holgados, aunque algunos, como el Monasterio de la Oliva, reparten entre menos, los actuales 193.000€, que se duplicaran, si no hacemos nada por evitarlo el próximo 2018. A estos frailes habría que preguntarles por su conciencia cristiana, si sienten y piensan en coherencia con su fe.
Y qué decir de la conversación entre Rajoy y Trump, aquella en la que “reafirmaron la fuerte alianza bilateral en una serie de asuntos de interés común”, ¿será Bardenas alguno de esos intereses?
Nosotras ante la mentira y la imposición de intereses, sólo entendemos una respuesta, que es la organización social, la denuncia y el derecho a decidir sobre estas tierras. Ante sus mentiras, nuestro esfuerzo y nuestra alegría, por haber sido capaces de aglutinar fuerzas tras sesenta años de imposición. El próximo 4 de marzo presentaremos públicamente este Frente Común que estamos construyendo para decidir cómo queremos usar las Bardenas y para exigirles que se vayan, que el 2018 queremos unas BARDENAS LIBRES y que decida el pueblo.
