Los trabajadores y trabajadoras de Piher en Tudela han iniciado este mediodía una convocatoria de movilizaciones con el objetivo de desbloquear la negociación del convenio colectivo.
La concentración que han protagonizado a las puertas de la factoría ubicacada ene l Polígono Industrial Municipal ha sido la primera iniciativa adoptada por la mayoría de los 190 empleados de la empresa tudelana, perteneciente desde 2017 al grupo norteamericano Amphenol, que han visto congelado sus salarios en los tres últimos años en un entorno económico de inflación creciente y unos resultados económicos récord por parte de la multinacional.
«Las propuestas de la empresa han sido siempre mediocres»
Ignacio Calvo, presidente del comité de empresa, ha explicado que desde el inicio del proceso de negociación en enero las propuestas de la empresa «han sido mediocres» y ha recordado que Amphenol ha obtenido en el último año un beneficio récord de un 70%, que asciende al 200% en el periodo de los últimos cinco años. A cambio, ha explicado, «nos ofrecen un IPC y recuperar el poder adquisitivo en un periodo de tiempo bastante prolongado y que, además, no nos va a permitir recuperar nunca lo que hemos perdido ya».
El comité de empresa de Piher cuenta con 4 representantes de UGT, 3 de LAB, 1 de ELA y 1 de CC.OO.
El representante de los trabajadores ha descrito que la situación de la negociación tras cuatro meses es de bloqueo. «No quieren subir más y no nos ha quedado otra que exponer esta situación al resto de la plantilla. Esta concentración ha sido el primer escalón y valoraremos próximos pasos si no quieren seguir negociando. Si después de estas movilizaciones la empresa no esta dispuesta a seguir negociando no nos quedará otra que ir a la huelga si así lo acuerda la plantilla», ha avanzado.
La pretensión de los trabajadores es recuperar los derechos sociolaborales y el estatus económico que se ha ido quedando por el camino en los últimos años. Para ello piden recuperar un IPC en tres años del 18%. «En los últimos tres años de congelación salarial hemos perdido un poder adquisitivo del 16%, pero las propuestas de la empresa no se están acercando a estas cifras», ha explicado Calvo.
Donde si reconoce que ha habido un acercamiento ha sido en la parte social. «En cuanto a derechos han mostrado bastante disposición en varios puntos, los económicos no los tratan, y lo que sí han hecho es regular aquellas cuestiones del convenio que eran ilegales».
Preocupación por la destrucción de empleo
Cuando Amphenol adquirió Nacesa en el año 2017 la factoría tudelana contaba con un total de 270 trabajadores. «Desde entonces se ha reducido la plantilla en 80 personas en 6 años, una dinámica de destrucción de empleo que genera bastante inquietud entre la plantilla porque los nuevos productos no generan tanto empleo como los antiguos», ha recordado Calvo. «Antes el 100% de los mecanismos se fabricaban en Tudela y ahora, los nuevos productos son en su mayoría son subcontratados. Un hecho que nos inquieta en cuanto a la sostenibilidad de empleo y externalización, porque son proyectos manuales que salen a países con mano de obra más barata».