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José María del Arco, defensa del C.D. La Peña de Fustiñana durante toda su trayectoria deportiva, recibió el homenaje de su pueblo tras colgar las botas. De esta forma, el club quiso reconocer la entrega de este carismático jugador que ha vivido con auténtica pasión cada minuto que ha defendido la camiseta del equipo de su pueblo. Una elástica que, precisamente, le entregó enmarcada el actual presidente de la entidad, Gerardo Olea.
«Es un chico que empezó de muy joven. Sobresalía por su fortaleza física y que se adaptaba muy bien a cualquier posición en la línea defensiva principalmente. Estuvo en varias etapas, y su mayor virtud era el compañerismo y la nobleza. Estaba siempre para lo que el entrenador necesitara de él, sin poner nunca una mala cara. Sin duda alguna fue una de las personas que hacían equipo». Con estas palabras lo describe uno de sus entrenadores, David Aguerri, actual técnico de la Peña de Fustiñana.
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